Los pasajeros que se olviden de usar máscaras en el metro de Beijing pueden pasar primero por el control de seguridad y luego comprar máscaras. ¿Cómo evaluar el "servicio de tolerancia a la escasez"?
El servicio tolerante a defectos es un tipo de servicio considerado, humano y flexible.
Con el resurgimiento de la epidemia, muchas áreas estipulan que se debe usar una máscara al subir al autobús o al ingresar a la estación, de lo contrario no se le permitirá ingresar. Muchas personas descuidadas se olvidan de usar máscaras y tienen prisa por ingresar a la estación, por lo que solo pueden comprar máscaras en otros lugares antes de ingresar.
Este ida y vuelta no sólo hace perder tiempo, sino que también retrasa las cosas. Si las personas están ansiosas, pueden tener disputas o disputas con los voluntarios o el personal de servicio. Para solucionar este problema, se han instalado 711 máquinas expendedoras de mascarillas en la Compañía del Metro de Beijing para facilitar el acceso al público en general. Pero estos precios de venta tienen un inconveniente: todos están diseñados dentro del sitio. No se pueden comprar máscaras sin entrar.
En cuanto a por qué estas máquinas expendedoras están instaladas en el área de pago, es porque cuando se construyó el metro, cada área fue planificada y las máquinas expendedoras tenían su propia red y suministro de energía regional independiente.
Siempre hay más formas que métodos Para solucionar este problema, el metro ha implementado un servicio de escasez en el que se puede pasar primero por seguridad y luego entrar a la estación a comprar mascarillas. El precio de las mascarillas en la máquina expendedora es muy rentable, casi el mismo que el precio exterior. Muchos ciudadanos consideran que esta cómoda decisión es muy buena, ya que reduce considerablemente el tiempo y elimina la necesidad de correr de un lado a otro para comprar mascarillas. Esto también refleja en gran medida la flexibilidad e innovación del servicio.
Durante la epidemia, las máscaras son un elemento imprescindible para que todos salgan. Por lo general, puedes guardarlas en tu bolso o bolsillo. Puedes poner algunas más a la vez para evitar que se rompan o se rompan. reemplazarlos.
Durante la epidemia, debo tomar buenas precauciones y no correr ni reunirme en grupos. Lávate las manos con frecuencia al salir y volver a casa, elige un lugar con poca gente cuando salgas a cenar y recuerda lavarte las manos antes de comer.
Si se presentan síntomas, busque tratamiento médico lo antes posible y no se quede en casa. Aunque la vacuna ya está en el mercado, aún no se ha popularizado completamente y es necesario seguir reforzando la protección epidémica. Los servicios tolerantes al déficit dejan la conveniencia a las masas y los problemas a ellos mismos. Aprobado por una decisión tan buena. En comparación con esas regulaciones rígidas, dichas regulaciones son más humanas y humanas.