¿Cómo entrenan las mujeres inteligentes a los hombres?
(1) Dígale a la otra parte lo que quiere de vez en cuando y deje que la otra parte se familiarice con su forma de expresión a través de expresiones explícitas e implícitas.
Un hombre nunca sabrá sus verdaderas intenciones por adivinar. Debes dejar claro tus requerimientos desde el principio, cuál es tu expresión habitual y cuántas veces has experimentado este tipo de cosas, para que él sepa qué hacer para complacerte.
Cuando no lo hace lo suficientemente bien, no debe negarlo por completo. Debería reconocer lo que ha hecho y señalar lo que podría haber hecho mejor.
Una persona crecerá en un ambiente positivo y se animará a estar más motivada. ?
(2) Felicítelo vigorosamente delante de familiares y amigos. Alábalo por todo lo que ha hecho por ti. Luego, cuando llegó a casa, insinuó que haría lo mismo frente a su familia y amigos en el futuro.
Y espero que él haga la mayoría de tus cumplidos para que no sea incómodo la próxima vez que un amigo te pregunte. ?
(3) Díganse unos a otros cuando salgan y regresen a casa, y den algunas expresiones cálidas. Un beso de despedida, por ejemplo, o un abrazo pueden resultarle desconocidos al principio, pero luego, una vez que se acostumbra, se volverá dependiente de ellos. ?
(4) Muestra tu lado cálido y delicado, pero no pagues demasiado, solo hazlo de vez en cuando. Como apretarle los hombros cuando está cansado como un regalo ocasional para recordarle el momento. Después de eso, hazle sentir que su esposa necesita muchos cuidados y pídele que te los devuelva como corresponde. ?
(5) Vuelve a casa todos los días y dale a ambas partes la oportunidad de no mirar sus teléfonos, aunque sea durante 15 minutos, para sentarse e intercambiar pensamientos y experiencias del día. Escúchate atentamente a ti mismo. Quizás no puedas ayudarlo con sus asuntos, pero puedes brindarle apoyo emocional. Sentirá que el hogar es muy cálido y que no importa lo duro o cansado que esté afuera, todo vale la pena.
(6) Enséñele a cocinar y luego elogie su progreso en la cocina. En realidad, los hombres tienen mucho talento en la cocina, pero no han tenido la oportunidad desde que eran jóvenes. Cuando la comida que cocina es deliciosa, en realidad se siente feliz por dentro. No lo ridiculices por un fracaso, sino afirma sus acciones por amor. Cuando puede cocinar más y más platos, en realidad está creciendo. Este proceso debe registrarse y compartirse activamente con amigos. Hazle saber que estás orgulloso de él. Cuando haga de la cocina un hábito, te lo pasarás genial.
La gente buena se puede cultivar. La clave es su propia actitud y proceso paciente. Te deseo una vida feliz.