No se puede comer comida rápida cuando se alquila una casa.
En opinión de mucha gente, a los jóvenes de hoy en día no les gusta cocinar ni son buenos cocinando. De hecho, se trata de un prejuicio contra los jóvenes. Productos de comida rápida o no, los jóvenes simplemente no quieren cocinar. A medida que se desarrolla la economía moderna, los salarios de los jóvenes también han aumentado, pero también ha aumentado la presión para duplicar sus salarios. Los jóvenes no tienen mucho tiempo para cocinar por sí mismos, por lo que naturalmente demostrarán que no saben cocinar, pero esto no significa que los jóvenes se nieguen a aprender a cocinar. Debemos cambiar esta idea errónea.
Esto no llevará a los jóvenes a negarse a aprender a cocinar: los productos de comida rápida son sólo un complemento.
De hecho, el posicionamiento de los productos de comida rápida es relativamente claro. Los productos de comida rápida siempre han existido como complemento y no son la principal forma de vida de los jóvenes ni de muchas personas en la actualidad. Debemos tener claro esto. Este posicionamiento también significa que los jóvenes sólo considerarán este producto como un complemento a corto plazo para la nutrición de su cuerpo, y no como el producto principal para su vida y su trabajo. Si tuvieran tiempo, ¿quién querría comer un producto vegetariano que parece nutritivo pero que en realidad es nutricionalmente deficiente? Tras aclarar este posicionamiento, sabemos que los productos de comida rápida no provocan en absoluto que los jóvenes se nieguen a aprender a cocinar.
Esto no lleva a que los jóvenes se nieguen a aprender a cocinar: los jóvenes simplemente comen productos de comida rápida cuando no tienen tiempo para cocinar.
Hoy en día, los jóvenes cocinan menos. No significa que los jóvenes no puedan cocinar, ni que los jóvenes se nieguen a aprender a cocinar. Cuando mucha gente se queda en casa, todos han estudiado cómo cocinar mejor. Cocinar es un trabajo delicado que sólo el tiempo puede lograr. Los jóvenes tienen tanta presión laboral y tan poco tiempo libre que, naturalmente, no tienen mucho tiempo para cocinar. Debemos entender esta relación lógica.