¿Qué debo hacer si me encuentro con un mal propietario al alquilar una casa?
El primero es el propietario que aumenta los precios a su antojo. Este tipo de arrendador acordará el monto del alquiler y el depósito al firmar el contrato, pero encontrará varias razones para aumentar el precio durante el período de arrendamiento, como aumento de precio, aumento de la factura de servicios públicos o la casa necesita reparaciones. Nos amenazaron con mudarnos si no aceptábamos el aumento de precios. En este caso, sacaría un contrato y discutiría con ellos. El contrato estipula el importe del alquiler y la fianza, así como la duración del arrendamiento. No tienen derecho a subir los precios a voluntad. Si todavía no me escuchan, presentaré una queja ante los departamentos pertinentes o buscaré un abogado que me ayude a proteger mis derechos.
El segundo es el arrendador que entra y sale a su antojo. Este tipo de arrendador entrará en nuestra habitación alquilada sin autorización cuando no estemos en casa, o entrará sin llamar cuando estemos en casa. Dirán que son los dueños de la casa y tienen derecho a inspeccionar el estado de la casa o llevarse cosas en cualquier momento. En este caso les dejaría claro que aunque ellos son los dueños de la casa, nosotros somos los inquilinos legales y tenemos derecho al espacio privado y a la seguridad de la propiedad. Si todavía no respetan nuestros derechos cambiaré las cerraduras o instalaré cámaras para protegerme.
El tercer tipo es el propietario que se apodera del dinero a voluntad. Este tipo de arrendadores encontrarán diversas excusas para descontarnos la fianza cuando queramos dejar el alquiler, como que la casa está dañada, no está limpia o no la paga a tiempo. Dirán que la fianza es para mantener la casa intacta y ordenada. Si hay algún problema, se reservan el derecho de deducir parte o la totalidad del depósito de seguridad. En este caso, verificaré con ellos que el contrato establezca las reglas y condiciones que se deben seguir al cancelar el contrato de arrendamiento, y tomaré fotografías y documentos para demostrar que la casa no está dañada ni contaminada. Si aún así no me devuelven el depósito, presentaré una queja ante el departamento correspondiente o buscaré un abogado que me ayude a proteger mis derechos.
En resumen, es muy molesto e inútil encontrarnos con propietarios poco razonables al alquilar una casa, pero no podemos dejar que nos intimiden. Debe conocer sus derechos y obligaciones como inquilino y protegerse de manera legal y razonable.