¿Qué pasa con la opresión en el pecho, la dificultad para respirar y la debilidad en las extremidades?
Primero, considere los trastornos iónicos que tendrán síntomas clínicos obvios.
En segundo lugar, además, en el caso de las enfermedades endocrinas y metabólicas, las situaciones mencionadas anteriormente suelen ocurrir cuando la función tiroidea es baja, la función paratiroidea es baja y la función de la corteza suprarrenal es insuficiente.
En tercer lugar, si el paciente tiene enfermedades cardiogénicas, como enfermedad coronaria, angina inestable, insuficiencia cardíaca, arritmia, etc., el paciente presentará los síntomas clínicos anteriores.
En cuarto lugar, la miocarditis y la miocardiopatía graves también pueden causar las afecciones anteriores. Para las enfermedades respiratorias, son comunes las infecciones respiratorias agudas de gran área, como infección pulmonar, pleuresía, etc. En este momento también pueden aparecer opresión en el pecho, dificultad para respirar y debilidad general, pero suelen ir acompañadas de un aumento de la temperatura corporal. La opresión en el pecho, la dificultad para respirar y la debilidad de las extremidades pueden ser síntomas de insuficiencia cardíaca o pueden ser causados por insuficiencia cardíaca. La insuficiencia cardíaca puede provocar una reducción de la eyección del corazón, lo que provoca un suministro insuficiente de sangre a todo el cuerpo, lo que provoca debilidad en las extremidades. La insuficiencia cardíaca puede provocar hipoxia, lo que provoca opresión en el pecho y dificultad para respirar. Además, pueden producirse arritmias graves, como taquicardia por reentrada auriculoventricular. Una frecuencia cardíaca excesiva afectará la función de eyección del corazón, lo que provocará un suministro de sangre insuficiente a todo el cuerpo. También puede ser causada por una enfermedad pulmonar, como un ataque agudo de asma, que también puede provocar hipoxia, lo que provoca debilidad en las extremidades, opresión en el pecho y dificultad para respirar. Además, tenga en cuenta la posibilidad de hipopotasemia. La hipopotasemia causa debilidad en las extremidades, principalmente debido a una excitabilidad neuromuscular reducida. La hipopotasemia también puede causar arritmia, disminución de la contractilidad del miocardio, disminución de la función cardíaca y provocar opresión en el pecho y dificultad para respirar.