¿Qué comer en otoño?
Frutas de temporada aptas para el consumo en otoño
Pera
La pera es sin duda una fruta imprescindible en otoño. Las peras no sólo son dulces y jugosas, sino que también tienen el efecto de eliminar el calor, aliviar la tos y reducir la flema, producir fluidos corporales y calmar la sed. Comerlas en otoño puede prevenir y mejorar la sequedad de garganta y el dolor. Las peras se pueden lavar y comer directamente, exprimirlas para obtener jugo, cocerlas al vapor, lavarlas, pelarlas y cortarlas en trozos, cocinarlas con arroz para hacer gachas o hervirlas en agua de peras. consumo. Por ejemplo, la pera guisada con azúcar de roca, el agua de pera con azúcar de roca, etc. son formas comunes de comer peras. No solo son dulces y deliciosas, sino que también pueden eliminar el calor, aliviar la tos, reducir la flema y proteger la garganta. Sin embargo, cabe señalar que las peras son frutas frías, por lo que a las personas con deficiencia de frío no se les recomienda comerlas crudas, por lo que deben cocerse al vapor antes de comerlas.
2. Dátiles frescos
El fruto representativo del otoño son los dátiles. El contenido de vitamina C de los dátiles frescos ocupa el primer lugar entre las frutas, de 6 a 8 veces mayor que el del espino, 10 veces mayor que el de la milenrama, 13 veces mayor que el de las naranjas, 70-100 veces mayor que el de las manzanas y 140 veces mayor que el de las peras. Se le conoce como el "Rey de las Frutas" y la "Píldora de Vitaminas Vivas". Además, los dátiles frescos también contienen flavonoides, que son beneficiosos para la conservación de la vitamina C. Cada 100 gramos de dátiles frescos pueden satisfacer nuestra demanda diaria de vitamina C. La fibra dietética que contienen puede prevenir el estreñimiento.
Aunque el valor nutricional de los dátiles frescos es muy alto, lo mejor es no superar los 20 a la vez. Comer demasiado estimulará la secreción excesiva de ácido gástrico, la distensión abdominal, dañará la función digestiva y provocará enfermedades del tracto digestivo.
3. Espino
El otoño es la época de cosecha del espino. El espino rojo parecido a un ágata es delicioso. El espino puede favorecer la secreción de jugos digestivos, aumentar el apetito y ayudar a la digestión. El espino también es conocido como un "pequeño experto" en reducir la presión arterial y el colesterol debido a sus ácidos triterpénicos y flavonoides. La medicina tradicional china cree que el espino es de naturaleza agria, dulce y ligeramente cálida. Puede ayudar a la digestión, fortalecer el estómago, promover el qi y la circulación sanguínea, detener la disentería y reducir la presión arterial. El espino crudo también tiene el efecto de eliminar la grasa corporal y reducir la absorción de grasa. Las personas que quieran perder peso pueden comer más.
Comer espino crudo durante mucho tiempo puede formar gastrolitos y aumentar el riesgo de sufrir úlceras gástricas, sangrado gástrico e incluso perforación gástrica. Por eso, se recomienda cocinar espino o preparar té. Corta el espino en trozos y prepáralo con agua hirviendo, lo que puede diluir en gran medida el sabor amargo del espino. Además de preparar té, el espino también se puede consumir como verdura. Por ejemplo, al cocinar gachas o platos de carne, coloque de 5 a 8 espinos, lo que no solo puede realzar el sabor, sino también garantizar la absorción de los nutrientes del espino.
Caquis
Como dice el refrán, los dátiles en julio y las peras en agosto, los caquis en septiembre se pondrán rojos. En otoño, los caquis de color rojo anaranjado empiezan a “prepararse” y se convierten en la fruta más estacional. Los caquis son una de las mejores frutas y verduras para afrontar la sequía otoñal. Puede nutrir los pulmones y el estómago, eliminar el calor y la sequedad y fortalecer el bazo. Además, está repleto de nutrientes. A excepción del zinc y el cobre, otros ingredientes son mejores que las manzanas. Por eso, en la dorada temporada de otoño, hay un dicho que dice que "una manzana al día no es tan buena como un caqui al día".
Verduras aptas para el consumo en otoño
1. Rábano blanco
Como dice el refrán, comer rábano en invierno y jengibre en verano no requiere prescripción médica. De esta frase podemos ver lo bueno que es comer rábanos en otoño e invierno. El rábano blanco siempre se ha considerado un pequeño ginseng. Comer rábano en otoño e invierno puede disipar el frío, mantener el calor, calentar el estómago, eliminar el calor y aliviar la tos. El rábano blanco se puede comer crudo o cocido. Dos formas diferentes de comer también tienen diferentes efectos sobre la salud. Por ejemplo, comer rábano blanco crudo puede eliminar el calor, promover la producción de líquidos, calmar la sed, aliviar la tos y reducir la flema, lo cual es especialmente adecuado para personas con tos y dolor de garganta. Los alimentos cocinados pueden fortalecer el bazo y el estómago y promover la absorción y la digestión. Sin embargo, comer para personas con deficiencia de Qi no es bueno para su salud.
Castaña de agua
La castaña de agua es la castaña de agua que come la gente corriente. Es blanco y jugoso, tiene un sabor dulce y crujiente y es rico en valor nutricional. Las castañas de agua, que también son un producto nutricional común de temporada en otoño, se llaman peras de nieve subterráneas. Hace un momento mencionamos los beneficios para la salud de las peras. Dado que las castañas de agua se llaman peras de las nieves subterráneas, significa que también tienen peras.
Al igual que las peras, las castañas de agua también se pueden comer crudas o cocidas. Sin embargo, hay que tener en cuenta que las castañas de agua no son fáciles de digerir, por lo que no deben consumirse más personas con deficiencias de bazo y estómago. No se recomienda la indigestión para comer más. Si se come cruda, la epidermis debe lavarse a fondo o pelarse directamente; de lo contrario, la acumulación de sustancias tóxicas y nocivas y parásitos en la epidermis pondrá en peligro la salud.