El consumo de alcohol es en su mayor parte autoimpuesto y autocontrolado.
En realidad, todas estas personas son hipócritas, porque beber demasiado es solo una bofetada y situaciones tan extremas rara vez ocurren.
Y con la introducción de regulaciones pertinentes, esta situación se ha vuelto cada vez más rara.
Beber mucho alcohol a menudo se debe a que estás en un estado de ánimo fluctuante y quieres consumir alcohol para aliviar tus preocupaciones y aprovechar la oportunidad de beber para desahogarte. Bebes demasiado y culpas a los demás.
Esto se debe a que tengo una base emocional pobre y tengo la necesidad y el deseo de beber en exceso. Por lo tanto, beber en exceso es buscar problemas.
Este es un comportamiento innecesario y puede causar graves daños al organismo.
No recomendamos beber tragos grandes. Beber tragos pequeños es solo para ajustar la atmósfera y dejar que todos sientan las dulces palabras en sentimientos sutiles.
Beber un poco de vino puede despertar nuestro estado de ánimo y ponernos en un estado de excitación. En este momento, nuestras caras están rojas y hermosas.
Beber alcohol también es bueno para la circulación sanguínea. Beber menos alcohol es bueno para la salud. Nunca bebas demasiado y no culpes a los demás por dejarte beber demasiado. Todo esto son mentiras y excusas.