Cómo conservar las mazorcas de maíz frescas durante mucho tiempo
1. Refrigeración
Mete el maíz fresco en una bolsa de plástico y guárdalo en el cajón de verduras del frigorífico. Este método mantendrá el maíz fresco durante aproximadamente una semana.
Pasos:
Elija maíz fresco que no haya sido desgranado y preste atención a su integridad, sin daños y sin plagas.
Coloque cada maíz en una bolsa de conservación y exprima la mayor cantidad de aire posible para reducir el contacto con el oxígeno y ralentizar la tasa de deterioro.
Coloca la bolsa de conservación de maíz en el cajón de verduras del frigorífico, porque la temperatura y la humedad de este lugar son las mejores para conservar las verduras.
2. Cocción y almacenamiento
Primero cocina el maíz fresco, luego pela las hojas, mete las mazorcas en una bolsa de plástico y guárdalas en el cajón de verduras del frigorífico. refrigerador. Este método puede mantener el maíz fresco durante 2 o 3 días.
Pasos:
Selecciona maíz fresco y pela la hoja de maíz.
Pon el maíz en agua hirviendo y cocina durante 10-15 minutos hasta que esté suave, pero no lo cocines demasiado, de lo contrario afectará el sabor.
Utiliza unas pinzas o utensilios de cocina para sacar el maíz del agua y lava el maíz con agua fría para que sea más fácil pelar las mazorcas.
Pela las mazorcas de maíz y colócalas en una bolsa de plástico para exprimir la mayor cantidad de aire posible. Coloca la bolsa Ziploc en el cajón de verduras del refrigerador.
3. Almacenamiento en congelación
Pele la piel y la seda del maíz fresco, coloque la mazorca en una bolsa sellada y guárdela en el refrigerador. Este método puede mantener el maíz fresco durante 6 a 8 meses.
Pasos:
Selecciona maíz fresco y pela la cáscara y la seda.
Mete las mazorcas de maíz en una bolsa de plástico o en una bolsa sellada, exprime la mayor cantidad de aire posible, luego sella la bolsa y marca la fecha y la cantidad.
Mete la bolsa sellada en el congelador del frigorífico para asegurar que la temperatura sea inferior a -18°C para evitar un exceso de cristales de hielo en el maíz, que puede provocar una disminución de la calidad.
Antes de usar, saca el maíz del frigorífico, descongela, tuesta o cocina.