¿Qué tipo de colchón antiácaros debo elegir?
1. Colchón antiácaros de látex natural
La materia prima del colchón antiácaros recubierto de caucho natural se extrae del roble, que contiene proteína de caucho que tiene la capacidad de. Inhibe el crecimiento de bacterias y ácaros. Además, cuanto mayor sea el contenido de látex natural en los productos de látex natural, mejores serán los efectos antibacterianos y antiácaros. El látex natural suave y transpirable tiene poros naturales formados durante el proceso de producción, lo que tiene un efecto de ventilación natural. Los productos de látex natural ofrecen excelente elasticidad, excelente textura, suavidad, ajuste y sofisticación. El material de látex natural ayuda a la salud y al sueño, tiene buen tacto, dureza moderada, es muy cómodo y fácil para conciliar el sueño. Si bien soporta completamente la presión de varias partes del cuerpo, puede corregir malas posturas para dormir.
2. Colchón antiácaros con tejido antibacterias y antiácaros
El tejido físico antibacterias y antiácaros es el tejido del colchón antiácaros. Generalmente, se utilizan tejidos artesanales especiales de alta densidad para aislar bacterias y ácaros. Sin embargo, la densidad del tejido de este tipo de tejido es demasiado alta, lo que también afectará su transpirabilidad, incluida la sensación y la comodidad. Y sólo puede aislar pero no ahuyentar a los ácaros. Probablemente todavía quedarán ácaros imposibles de matar. Este tipo de tejido se basa en una estructura física pura para lograr una protección antibacteriana y antiácaros. No sólo es muy eficaz, sino que además no tiene resistencia a los ácaros y no tiene efectos secundarios. Actualmente, el único tejido conocido con propiedades físicas antibacterianas y antiácaros es el tejido de fibra de bambú. Los tejidos de fibra de bambú se dividen en tejidos de carbón de bambú, tejidos de carbón de bambú y tejidos de fibra de bambú según los diferentes materiales y procesos. La más eficaz es la tela de carbón de bambú, cuya capacidad antibacteriana es 3 veces mayor que la de la tela de carbón de bambú.