Al águila pescadora, cuyo nombre científico es cormorán, también se le llama cuervo negro en algunos lugares. Las plumas son generalmente negras, con un brillo verde púrpura en la cabeza y el cuello, comisuras de la boca y bolsas de la garganta de color amarillo verdoso, blanco debajo de los ojos, hombros y alas de color marrón cobrizo con brillo metálico, bordes de plumas de color azul cobrizo oscuro. , y cola redondeada, con plumas blancas sedosas en la cabeza, una cresta discreta en la parte posterior de la cabeza e iris verde esmeralda, ¡muy hermosa! Los cormoranes son buenos nadando y buceando. Al bucear, primero saltan fuera del agua y luego giran hacia el agua con una postura elegante. Cuando cazan, los cormoranes meten la cabeza en el agua para rastrear peces y sus alas han evolucionado para ayudarles a remar en el agua. Los cormoranes tienen una visión y un oído muy sensibles, lo que les ayuda enormemente en la caza. No importa cuán ágil sea la presa bajo el agua, el águila pescadora inevitablemente estira el cuello para asestar un golpe mortal con su pico afilado.
En los pueblos costeros del sur, los pescadores suelen llevar consigo cormoranes domesticados cuando van a pescar. En la proa del barco había cormoranes, cada uno con un collar alrededor del cuello. Cuando los pescadores ven un pez, silban y los cormoranes saltan al agua para atraparlo. A causa del collar, el cormorán atrapó el pez pero no pudo tragarlo, por lo que tuvo que regresar al barco con el pez en la boca. Después de que el dueño se llevó el pez, el cormorán se sumergió en el agua para pescar otro pez. Cuando se encuentran peces grandes, varios cormoranes lo capturan juntos. Algunos picoteaban los ojos del pez, otros mordían la cola y otros mordían las aletas. Estaban en perfecta armonía. Una vez terminada la pesca, el dueño les quitó los collares a los cormoranes y les dio el pescado pequeño preparado. Este método de pesca es interesante y eficaz.