Preparación para el mal de altura
Pasos específicos para afrontar el mal de altura:
Preparar una bolsa de oxígeno: la meseta es hipóxica, y la hipoxia es la principal causa del mal de altura. Cuando sienta mal de altura, debe reponer oxígeno a tiempo para aliviar síntomas como opresión en el pecho y dificultad para respirar. Sin embargo, cuando no esté haciendo ejercicio y sienta que no hay escasez de oxígeno, trate de no inhalar oxígeno para permitirse hacerlo. adaptarse al clima de meseta lo antes posible.
Dieta: En primer lugar, beber suficiente agua y comer más frutas, verduras y otros alimentos ricos en vitaminas y de fácil digestión. No coma, fume ni beba en exceso. El agua es lo más importante. Asegúrese de reponer agua a tiempo, no permita que el cuerpo se deshidrate y no coma demasiado, porque comer demasiado puede aumentar la carga sobre el tracto gastrointestinal, provocando palpitaciones y opresión en el pecho.
Mantén la respiración tranquila: No uses mascarillas ni otras cosas que afecten la respiración, y asegúrate de prevenir resfriados. La posibilidad de sufrir edema pulmonar por altura puede aumentar después de un resfriado, y la mala respiración después de un resfriado afectará la entrada de oxígeno.
No hagas ejercicio extenuante: Si notas mal de altura, debes dejar de hacer ejercicio inmediatamente para evitar consumir energía física y oxígeno, y hacer una pausa en el tiempo. Deben evitarse ejercicios como correr.
Tomar medicamentos: Si se presenta mal de altura, se debe tomar algún medicamento para prevenir, aliviar y prevenir el mal de altura.
Mantén el buen humor: En las zonas de meseta, debes mantener el buen humor y mantener la calma en momentos de problemas. El buen humor es muy importante para regular la adaptabilidad del cuerpo.