El método de vestir a los bebés en invierno es tres puntos fríos y siete puntos cálidos. ¿Estás vestido correctamente?
Nuestros antepasados nos dejaron mucha información valiosa. Hay un dicho en la medicina china que dice que los niños deben tolerar el 30% del frío y usar el 70% del calor.
El cuerpo del bebé está lleno de energía yang, que es yang puro y puede generar calor fácilmente. Si se viste demasiado caliente, los huesos y músculos de su bebé se volverán demasiado blandos, lo que no favorece el crecimiento y desarrollo de su bebé. Demasiado calor también puede dañar la piel y los músculos de su bebé. En casos graves, puede dañar los vasos sanguíneos y causar síntomas de "picazón", que es la llamada enfermedad de la piel por eczema. Por lo tanto, el bebé debe seguir el principio de "tres cálidos y dos fríos" al vestirse.
Entonces, ¿qué quieres decir con tres veces de calentamiento y dos veces de enfriamiento?
1. Mantener la espalda caliente: La espalda debe mantenerse caliente, pero debe estar caliente en lugar de fría. Después de tocarme el cuello, sentí la espalda cálida, no fría. Si sudas y te calientas demasiado, puedes enfermarte fácilmente. Mantener una temperatura adecuada puede prevenir enfermedades y reducir los resfriados.
2. Calentar el vientre: Calentar el vientre puede proteger la función intestinal del bebé, favorecer la digestión y absorción de los alimentos y evitar la diarrea y la energía abdominal provocadas por el estómago frío. Debido a que el bebé es muy activo y su vientre queda expuesto fácilmente, se debe envolver con una faja de algodón.
3. Pies calientes: Los pies son los más sensibles al mundo exterior y son el centro de la percepción. Use calcetines y zapatos de algodón para que sus hijos mantengan sus pies calientes y aseguren la adaptación del cuerpo a los cambios del entorno externo.
4. Cabeza fría: A la cabeza del bebé le gusta más estar fría que caliente. ¿Por qué dices esto? Desde la perspectiva de la medicina tradicional china, toda la energía yang de una persona se concentra en la cabeza y necesita ser distribuida. Si se tapa para evitar que se propague, el bebé se mareará. Un tercio del calor corporal de su bebé se pierde por la cabeza. Si se cubre la cabeza para evitar la disipación de calor, el bebé se rascará la cabeza por aburrimiento y puede desarrollar fiebre fácilmente.