¿Qué deben hacer los padres si su hijo tiene asma alérgica?
1. ¿Qué debo hacer si mi hijo tiene asma alérgica? Si tienen asma alérgica, deben acudir al hospital para recibir tratamiento, porque el asma alérgica es una enfermedad muy compleja y es una lesión crónica de la mucosa de las vías respiratorias. Sin un tratamiento regular, los ataques de asma en muchos niños pueden continuar. Ya sea asma alérgica o asma general, el tratamiento a largo plazo debe realizarse bajo la supervisión de un médico profesional. También se debe garantizar un sueño eficaz en la vida para evitar la fatiga excesiva y las fluctuaciones del estrés emocional.
2. Precauciones para niños con asma alérgica A lo que deben prestar atención los niños con asma alérgica es a prevenir la contaminación del tracto respiratorio. No se permiten perros, gatos y otras mascotas en casa, ni se permiten alfombras. En casa, se debe mantener la ventilación y la circulación del aire interior. Los niños con asma deben prestar atención a su dieta y evitar los alimentos alérgicos. Cuando hace frío, deben agregar ropa a sus hijos a tiempo para prevenir resfriados, prestar atención para evitar el ejercicio moderado y brindar una ventilación adecuada. Debido a que llorar y gritar provocarán una ventilación moderada y siempre estimularán los síntomas del asma, los padres deben prestar más atención en su vida diaria.
3. ¿Qué daño hace el asma a los niños? Los peligros del asma infantil son muchos. El peligro más común es la hipoxemia grave, que puede provocar cianosis, disnea y otros síntomas. Los ataques agudos de asma en los niños pueden causar fácilmente enfisema y neumotórax. En casos graves, pueden ocurrir condiciones potencialmente mortales. El asma puede afectar la respiración y el sueño normales del niño, lo que lleva a una disminución en la calidad de vida del niño. Además, cuando los niños tienen un ataque de asma, este estará acompañado de fiebre y secreciones respiratorias, produciendo una gran cantidad de bombas de moco, que pueden inducir fácilmente una infección en los niños. Si no se controla a tiempo, puedo tener repercusiones en el sistema digestivo del niño.