¿Cuándo es el día 28 del sexto mes lunar? ¿Puedo quemar incienso y adorar a Buda?
Adorar a Buda es un tema muy importante que los budistas deben aprender. Su verdadero significado es cultivar la igualdad y eliminar el hábito de la arrogancia. Usamos nuestra cabeza más noble para inclinarnos ante los pies del Buda más humilde, lo que se llama "ceremonia de recepción de los pies". El objetivo de este estudio es romper con nuestros hábitos de arrogancia e insensibilidad. Rendimos homenaje a la comunidad budista, no a la gente corriente, por lo que no funciona. Así que es una clase en el salón budista, y lo que aprendes debe usarse en la vida. En otras palabras, cuando vemos a todas las personas y cosas desde la mañana hasta la noche, somos tan humildes, modestos y respetuosos como Buda, respetando a todos los seres vivos, incluso a todos los malos pensamientos, ricos o pobres, con respeto por el corazón de Buda. Trata a todos por igual. Sólo así podremos alcanzar la igualdad.
Pero las cosas deben ser diferentes, pero los principios no son diferentes; es decir, hay diferencias de forma, pero no hay diferencia de corazón. Este es el Bodhisattva. "Las enseñanzas de Buda están en el mundo humano y no dañan al mundo humano". Desde la perspectiva de la ley mundial, la etiqueta es pobre. Por ejemplo, cuando el presidente y los creyentes comunes y corrientes vienen a visitarnos, ¿qué etiqueta debemos usar para tratarlos? Hay una diferencia. Esta diferencia es una diferencia establecida dentro de la diferencia, por lo que la diferencia no es diferencia. Por lo tanto, al estudiar el budismo, uno debe comprender la ley de la vida y la ley mundana; debe saber que no existen diferencias y también debe conocer el orden de las diferencias. No hay diferencia entre razón y mente, sólo en la forma. Puedes hacerlo perfectamente y manejarlo de manera integral. Está mal ser pobre de mente y razón. Eres una persona común y corriente, no un santo. Las cosas no están mal, pero tú también tienes la culpa, no eres compasivo, destruyes el orden social y confundes a la gente. Por tanto, para crear armonía, el director debe ser sabio.