Hay una grave escasez de buques de guerra rusos. Los medios rusos sugirieron pedir ayuda. China se ha enamorado de China.
Los informes indican que la Armada rusa ha pedido ayuda a países extranjeros muchas veces a lo largo de su historia de desarrollo, y su solicitud de ayuda a China comenzó en 2014. En ese momento, Occidente impuso sanciones a Rusia y Alemania se negó a proporcionar motores diésel MTU 16V4000M90 para las nuevas fragatas rusas de clase "Thug-M". Por lo tanto, el ejército ruso cooperó con China para reemplazar los motores alemanes por motores chinos CHD622V20 en las primeras cinco fragatas.
Actualmente, la Armada rusa se enfrenta a una grave escasez de acorazados principales. Actualmente sólo hay tres fragatas de nueva construcción en servicio. Según el plan, se deberían poner en servicio al menos entre 9 y 10 nuevas fragatas, y el coste supera con creces la predicción original. Según este cálculo, antes de 2020 el número de nuevas fragatas equipadas por la Armada rusa será menos de la mitad del plan original.
Se informa que China tenía en servicio 8 fragatas clase 056 y 2 fragatas clase 054A el año pasado, y el costo era mucho más económico. La cooperación entre Rusia y China en este ámbito puede resolver el problema de la insuficiencia de buques de guerra rusos. Rusia puede utilizar la fragata clase 054 de China como base, utilizando cascos y sistemas de energía chinos, así como armas y sistemas electrónicos rusos.