Una breve historia sobre el amor maternal (100 palabras)
Una tarde, la madre llamó a Lucy al dormitorio y le dijo: "¿Puedes hacer algo por mamá?"
"¿Es algo para que Lucy la conociera?" La madre comenzará la quimioterapia mañana. La madre sacudió la cabeza, besó la frente de Lucy y dijo: "Quiero que me cortes el pelo".
Lucy se sorprendió. ¿Dónde pueden cortarse el pelo los niños? Además, mi mamá tiene un hermoso cabello largo y rubio, de un pie de largo. Mi madre cuida bien su cabello y suele ir a una peluquería de alta gama para cuidarlo.
Lucy cogió un mechón de pelo de su madre y lo colocó entre las tijeras. "¿Estás segura?"
"Por supuesto, por favor hazlo". La madre sonrió con picardía.
Lucy estaba un poco emocionada y nerviosa. Aunque le encanta jugar con el pelo de la muñeca Barbie, esta es la primera vez que corta pelo real. Con un clic, un mechón de cabello cayó silenciosamente al suelo.
"¡Oh, es muy corto!"
"No importa, se ve bonito, jaja."
"Oh, se vuelve a acortar ..." Dormitorio Se llenó de las risas de madre e hija, y cada vez había más pelos en el suelo. Cuando Lucy terminó, el cabello de su madre medía sólo dos o tres pulgadas de largo, tan corto como un césped cortado al azar. Mamá sonrió en el espejo, abrazó a Lucy y dijo: "Gracias, cariño. Me gusta mucho este peinado. Parece una estrella de rock con personalidad". La madre y la hija se abrazaron y sonrieron. Ha pasado mucho tiempo desde que mi madre se enfermó.
Por la noche, mi padre se sorprendió cuando vio la apariencia de mi madre y dijo: “Cariño, ¿qué le pasa a tu cabello?”. Mi madre dijo casualmente: “Oh, de todos modos le pedí a Lucy que lo cortara. , mi cabello mejoró después de la quimioterapia. Se caerá. Es mejor hacer feliz al niño primero”.
Ahora, Lucy también es madre. Al recordar esa tarde de invierno, finalmente se dio cuenta de lo maravillosa que era su madre. Ante la vida, la vejez, la enfermedad y la muerte, su primer pensamiento fue hacer feliz a su hija. Por ello, no dudó en dar lo último que podía.