¿A una persona mayor de una zona rural se le debería servir vino de cumpleaños cuando cumple 70 años? ¿Quieres prohibirlo? ¿Cuál es la razón?
Hoy en día, las condiciones de vida de la gente son mejores, pero no tienen muchos hijos y algunos de ellos ya no están. Muchas personas mayores no quieren causar problemas a sus hijos y afectar su trabajo y su vida, por lo que alargan su vida. Algunos ya tienen 70 años y aún no lo han hecho. Por lo tanto, no se le puede obligar a vivir una vida larga. Lo más importante es fijarse en la actitud del niño. Además, las celebraciones de cumpleaños ya no son tan trascendentales como solían ser. Generalmente nos reunimos en un lugar pequeño para tener una cena de reunión, divertirnos, hacer felices a los mayores y pasar tiempo con los mayores y sus padres. Pero algunas personas celebran el cumpleaños de las personas mayores porque han entrado en contacto con los sentimientos de su círculo y han recibido regalos. La mayoría de estas personas son poderosas o ricas y su propósito es mostrar su estatus y adorar a sus antepasados.
La longevidad es un derecho individual y otros forasteros no tienen derecho a interferir, y mucho menos a prohibirla. En las zonas rurales, la gente y los vecinos no están acostumbrados a asistir a ceremonias. Por supuesto, si las dos familias tienen una buena relación o tienen un hijo juntos, esa es otra historia. Celebrar cumpleaños es diferente a otras bodas y celebraciones. Las felicitaciones son completamente voluntarias y no existen costumbres ni etiqueta. Celebrar una fiesta de cumpleaños para personas mayores también es una señal de respeto hacia las personas mayores. En las zonas rurales con profundas costumbres populares, en realidad es muy importante heredar esta virtud tradicional. De hecho, existen muchas virtudes tradicionales en las zonas rurales, como respetar a los mayores, respetar a los mayores, amar a los mayores y ayudar a los mayores. Por ejemplo, en la víspera de Año Nuevo, damos regalos o hacemos reverencias a los ancianos para saludar el Año Nuevo. Además, cuando los mayores celebren su cumpleaños, también recibirán felicitaciones y bendiciones colectivas de las generaciones más jóvenes. En realidad, esta es la encarnación de la virtud tradicional de respetar a las personas mayores. ¡Preciosa riqueza espiritual transmitida de generación en generación!
Si tratamos a las personas mayores con sinceridad, deberíamos tratar cada día como su cumpleaños. No hace falta que sea un pescado grande ni una carne, siempre que sea el favorito de los mayores, ya sea una bola de masa de verduras, una croqueta o un plato de polenta. ¡La piedad filial es parte de nuestras vidas! ¡El árbol quiere estar quieto pero el viento no para; el niño quiere ser alimentado pero nadie espera un beso! Si es un proyecto para dar cara a los demás, lo mejor es compartirlo en cada comida de cada día. ¡Los mayores serán más felices!