¿El derecho de uso del activo es un activo corriente o un activo no corriente?
Ampliación de la definición básica de derecho de uso de activo;
El derecho de uso de activo se refiere al derecho del arrendatario a utilizar el activo arrendado durante el plazo del arrendamiento. El derecho de uso de los activos pertenece a la categoría de activos y se refleja como activos no corrientes en el balance. Los pasivos por arrendamiento pertenecen a la categoría de pasivos y se enumeran según los pasivos no corrientes vencidos y los pasivos no corrientes vencidos dentro de uno; año.
Los activos deben medirse inicialmente al costo, incluyendo:
1. El monto de medición inicial del pasivo por arrendamiento.
2 El monto pagado en o antes. el inicio del período de arrendamiento El pago del arrendamiento, si existe un descuento de arrendamiento, debe deducirse del monto relacionado con el descuento de arrendamiento que se haya disfrutado
3.
4. Los costos de desmantelamiento y remoción del arrendatario. Los costos estimados incurridos para restaurar el bien arrendado, restaurar el sitio en el que se encuentra el bien arrendado o restaurar el bien arrendado a las condiciones pactadas en los términos. del arrendamiento.
Ampliación de la definición básica de activos no corrientes;
Los activos no corrientes se refieren a activos que no pueden realizarse ni consumirse dentro de un ciclo comercial de un año o más. Los activos no corrientes se refieren a activos distintos de los activos corrientes, que incluyen principalmente inversiones mantenidas hasta el vencimiento, cuentas por cobrar a largo plazo, inversiones de capital a largo plazo, materiales de ingeniería, inversiones inmobiliarias, activos fijos, construcciones en curso, activos intangibles, activos a largo plazo. -Gastos diferidos a plazo, etc.
Los activos no corrientes no pueden convertirse en fondos disponibles mediante determinadas operaciones económicas en el plazo de un año, como equipamiento empresarial a largo plazo, deterioro, etc. Por el contrario, los activos líquidos se pueden convertir en fondos en el plazo de un año. Los ejemplos incluyen los fondos existentes de una empresa o fondos bancarios, pagarés y cuentas por cobrar en una empresa e inventarios de mercancías.