¿A qué debes prestar atención cuando viajas al Vaticano?
Hay innumerables museos nacionales en el mundo, como la Ciudad Prohibida y el Louvre, pero el Museo del Vaticano fue el que más me sorprendió (no soy religioso). Cuando te sientas en el suelo y miras los murales, edificios y esculturas de abajo hacia arriba, sentirás verdaderamente al Dios que aman y una especie de paz que te pertenece desde el corazón. Ya sea que vayas allí en busca de libertad, escapar o buscar algo más, serás mucho más feliz.
Ten cuidado con los robos, protégete y no digas tonterías. Aunque no puedes poner dinero ni billetera en el bolsillo delantero de la ropa interior, no se recomienda usar una mochila (esta no es la sensación que puedes encontrar en una mochila pequeña, fresca y artística en mal estado). ¡Las niñas deben tener cuidado con los hombres cuando van solos! Los hombres allí tienen un sabor único. Cuando ven chicas extranjeras caminando libremente, se acercan a charlar más o menos.
Aunque muchos de ellos son muy guapos, hay que tener calma y no viajar con la mentalidad de que eres Audrey Hepburn. Las vacaciones en Roma no son algo que sucedería en la realidad. Compra un mapa, pide indicaciones en cualquier momento y protégete. Todavía quedan pequeños lugares para caminar. Sientes que caminar por una ciudad pequeña es realmente agotador. Se recomienda hacer más ejercicio antes de la salida, usar zapatos cómodos, caminar distancias más largas y ver paisajes más hermosos.