¿Por qué los médicos simplemente no les informan a los pacientes con cáncer sobre su condición?
Pero en la mente de muchas personas, el cáncer es una enfermedad incurable, que conlleva enormes costes y un tratamiento doloroso. Una vez que los pacientes pierden la confianza en sus cuerpos, es probable que acepten pasivamente el tratamiento o incluso lo rechacen. Al mismo tiempo, el malestar psicológico también afectará la salud física, por lo que el efecto del tratamiento del paciente será deficiente.
En primer lugar, los médicos consideran el estado de ánimo del paciente.
Que un médico les dé esta noticia suele ser una mala noticia para los pacientes y sus familias.
Si el paciente es joven, tiene una gran capacidad receptiva y una gran adaptabilidad física, el médico generalmente optará por informarle la afección con tacto y dejar que el paciente la comprenda primero. Este joven, debido a que el médico le dio a entender que probablemente estaba gravemente enfermo, al menos conoció la mala noticia de una enfermedad incurable y no colapsaría por ello.
A veces, los pacientes con los que se encuentra son mayores y tienen poca capacidad de aceptación. Independientemente de si el cáncer se encuentra en una etapa temprana o tardía, para estabilizar su estado de ánimo, el médico, naturalmente, no se atrevió a hablar casualmente sobre su condición frente a él, sino que se lo explicó claramente a sus familiares. Corresponde entonces a la familia decidir si comunicar la noticia al paciente.
Para estabilizar el estado de ánimo del paciente, el médico explicó indirectamente su estado de forma discreta y tortuosa.
En segundo lugar, las emociones afectarán el efecto terapéutico.
La razón para no informarle directamente al paciente sobre la afección no es solo estabilizar el estado de ánimo del paciente, sino también lograr el mejor efecto del tratamiento de seguimiento. Los pacientes fueron informados directamente sobre el cáncer. Una persona feliz y positiva puede perder fácilmente la confianza en la vida debido a un shock temporal e incluso tratar el tratamiento de forma negativa.
Si el paciente cree firmemente que no tiene remedio, no tiene confianza en el plan de tratamiento del médico y no coopera activamente con el tratamiento del médico, el efecto del tratamiento, por supuesto, empeorará. Incluso si coopera con el tratamiento, no cree que pueda curarse, lo que afecta indirectamente el efecto del tratamiento. Por eso, cuando el médico anuncia la mala noticia, el paciente y sus familiares no sólo deben aceptarla con tranquilidad, sino también transmitir confianza en la curación y ayudar al paciente a animarse lo antes posible.
En tercer lugar, las emociones positivas pueden ayudar a los pacientes a recuperarse.
A través de la investigación científica experimental moderna, el estado psicológico de las personas afectará la salud física. Incluso hay casos de cáncer que se curan gradualmente mediante un estado mental positivo. Por eso los métodos psicoterapéuticos modernos, como la autosugestión y la meditación, se han vuelto cada vez más populares. Los científicos también creen en el poder de las ideas.
En opinión de los médicos, la psicología positiva de los pacientes también puede restaurar su condición física lo más rápido posible, combatiendo así las células cancerosas. Muchos pacientes a menudo mueren no debido a las poderosas células cancerosas, sino porque son pesimistas, negativos, cada vez más delgados e incapaces de resistir el ataque de las células cancerosas. Desde esta perspectiva, la salud mental contribuye a la recuperación física.
En resumen, la razón por la que los médicos informan con tacto a los pacientes con cáncer sobre su enfermedad es para brindarles una preparación psicológica, para que poco a poco puedan aceptar la realidad y recibir un tratamiento de seguimiento con tranquilidad.