Muchos jóvenes de Shanghai todavía esperan comprar una casa. ¿Cuáles son sus razones para comprar una casa?
Primero, establecete y habrá más trabajos buenos para elegir. Existe una gran brecha en la disponibilidad de empleo entre las grandes ciudades y las pequeñas. Por un lado, se refleja en el número de puestos de trabajo; por otro, se refleja en el número de puestos de trabajo en algunas industrias emergentes. Las grandes ciudades tienen muchas oportunidades y un gran margen de desarrollo. Para los jóvenes, es una buena opción lograr logros en su carrera en las grandes ciudades, como Shanghai. Pero ¿y si sólo hay uno? ¿A la deriva en Shanghai? Mi identidad en Shanghai carece de un relativo sentido de pertenencia, tanto material como espiritual. Entonces, comprar una casa en Shanghai puede hacer que mi vida y mi trabajo en esta ciudad sean más estables.
En segundo lugar, busque seguridad espiritual y un sentido de pertenencia. Muchos vagabundos del Norte y de Shanghai tienen la sensación de que no importa cuánto tiempo hayan trabajado en esta ciudad, la conocen incluso más que muchos lugareños. Pero siempre no hay sentido de pertenencia y seguridad espiritual, no hay forma de registrarse como residente permanente registrado y no hay casa propia. Alquilar un apartamento siempre implica un ciclo interminable de mudarse, encontrar un apartamento y luego volver a mudarse, lo que puede hacer que las personas se sientan agotadas cada vez. Por lo tanto, la razón por la que muchas personas quieren encontrar una sensación de seguridad en una ciudad es para darse cierta sensación de seguridad y también para poder establecerse allí y convertirse en una parte real de la ciudad.
En tercer lugar, crear mejores condiciones para la próxima generación. Muchos jóvenes insisten en desarrollarse en las grandes ciudades y quieren establecerse en las grandes ciudades incluso si están bajo una gran presión. Parte de la razón es crear mejores condiciones materiales para la próxima generación. Es comprensible que las grandes ciudades tengan ventajas incomparables sobre las ciudades pequeñas en términos de infraestructura de apoyo y distribución de recursos educativos. Para la próxima generación, la competencia social a la que se enfrentan puede ser mucho mayor que la de sus padres. Por lo tanto, muchos jóvenes no quieren que sus hijos sigan su antiguo camino y esperan echar raíces en las grandes ciudades para que sus hijos puedan hacerlo. Vive en las grandes ciudades desde pequeño y gana en la línea de salida. Puede que esta idea no sea universal, pero de hecho es una cuestión que muchos jóvenes han considerado.