Como aprendiz, ¿qué debo hacer si mi maestro se niega a enseñarme algo?
En el ámbito laboral, aunque es imposible tomar atajos en todo, existen técnicas para completar cualquier trabajo. Si el mismo trabajo lo realizan empleados experimentados, será más fácil y se obtendrá el doble de resultado con la mitad de esfuerzo. Si lo hace un novato sin experiencia laboral, no importa cuán inteligente sea el novato, inevitablemente tomará desvíos.
Entonces, echemos un vistazo a cómo aprender de las experiencias de los demás y mejorar en el lugar de trabajo.
1. Para los recién llegados o los empleados que han sido transferidos a una nueva unidad, el conocimiento de los libros es sólo un rasguño. Una vez que te encuentras con un problema real, estos conocimientos teóricos no te ayudarán en absoluto a resolver el problema práctico sin combinarlo con la situación específica.
Lo que debes hacer es comprender completamente los procesos de trabajo de la unidad y departamento, estar familiarizado con tus compañeros y saber en qué es bueno cada uno de ellos y qué experiencia laboral tiene.
Desde el desarrollo de la unidad, estilo de gestión, ambiente cultural, normas y reglamentos, hasta lo específico. Debe tener una comprensión clara de la estructura del departamento, el alcance del negocio, las relaciones entre departamentos y los proyectos y estilos de trabajo de cada persona, de modo que pueda seleccionar de manera específica a los colegas que necesita conocer y con los que esté familiarizado.
2. Todo es difícil al principio. En la exploración y el aprendizaje inicial, puede ser un proceso doloroso y confuso porque no sabes por dónde empezar ni a quién pedir consejo.
En este momento, es especialmente necesario tomar la iniciativa y tomar la iniciativa de aprender, porque otros colegas no son las niñeras especialmente contratadas para usted por la unidad. Tienen su propio trabajo que hacer y sus propios motivos egoístas, pero no tienen la obligación de enseñarte.
Así que es tu deber si tus colegas están dispuestos a enseñarte, y también es tu deber si tus colegas se niegan a enseñarte. No tienes lugar para quejarte y no necesitas perder el tiempo quejándote. En su lugar, tome la iniciativa de consultar cuando tenga problemas.
3. Si realmente conoces a un "maestro" que se niega a enseñarte o reprime deliberadamente a tus compañeros, no dejes que su actitud afecte tu entusiasmo por aprender y trabajar.
Tienes que darte cuenta de que cuanto más estás en esta situación, más necesitas aprender de la experiencia de la otra parte, para que puedas fortalecerte más rápido y tener el poder de competir con ellos.
Por supuesto, si alguien se niega a enseñar, no puedes obligarlo. Recuerde, hay una mejor manera de hacer cualquier cosa, siempre que use su cerebro. Puedes utilizar el trabajo de la otra persona para observar y aprender, o puedes tomar la iniciativa.
Ayudad a compartir algún trabajo entre vosotros, aunque sea algo pequeño, mientras podáis participar en el trabajo, tendréis la oportunidad de aprender.
Si tu líder ha hecho arreglos para que un antiguo empleado te enseñe, pero la otra persona se niega a enseñarte, puedes fingir que eres serio o casual.
Escribe lo que el "maestro" te enseñó y lo que aprendiste en un día, preséntalo a tu líder en una ocasión adecuada y busca oportunidades para pedirle consejo.
No necesitas quejarte, quejarte ni expresar tus quejas. Siempre que cuantifique las cosas objetivamente, los líderes lo entenderán naturalmente. ¿No sería bueno hacer esto sin ofender a los colegas y sin resolver los problemas usted mismo?
Conclusión: Cualquier experiencia es sólo para algo, una situación especial. Aunque puedes aprender de las experiencias de otras personas, no debes copiarlas mecánicamente, de lo contrario cometerás el error del dogmatismo. Y si puedes combinarlo con tu situación real y utilizarlo de manera integral, esas experiencias pueden superar con creces su valor original.