¿Por qué a algunas personas les gusta vivir en zonas rurales?
Soy un paciente bipolar II nacido en los años 80 en una familia monoparental. Mi madre es muy fuerte y puede dejar a la gente sin aliento.
Siempre he sentido que la vida no tiene sentido. No me gusta socializar ni hacer amigos, no importa viajar, hacer ejercicio, leer o comer, siempre estoy solo.
Antes, alquilar un apartamento en la calle comercial del centro era muy cómodo y animado, y el dinero se gastaba como agua. El concepto que me inculcaron es ganar dinero, comprar una casa, comprar una marca famosa, llevar un bolso, compararme con otros, empujar a alguien hacia arriba y rebajar a otros, y no soy inmune. En 2019, compré una casa bajo todo tipo de desprecio y no logré obtener un préstamo.
Las intrigas de la vida urbana me enfermaron cada vez más. Me suicidé muchas veces, me enviaron al hospital y luego tuve la idea de escapar urgentemente de la ciudad.
Hace cinco años, fui a un país extraño, alquilé unas colinas áridas y construí mi propia pequeña granja, justo al lado del embalse, con muy buen ambiente. Durante el proceso de construcción, muchos aldeanos me acosaron y tuve muchos problemas indescriptibles, lo que llevó a la suspensión del trabajo durante casi un mes.
Me tomó medio año adaptarme a las serpientes, insectos, ratas y hormigas del verano, y luego tuve que enfrentarme al frío cortante del invierno. Al principio, dependía de mecedoras, mecedores y mantas eléctricas para dormir. Luego instalé una chimenea y mi vida se sintió completa.
Ve a la escuela si no sabes hacer el trabajo agrícola. Si tienes misofobia, déjala. No puedo usar ropa nueva, es fácil que se rompa y se ensucie, y poco a poco me acostumbro a ser descuidado. Ser descuidado me ha hecho volar por completo, me he ahorrado muchos gastos innecesarios y mi condición es cada vez mejor. La enfermedad que duraba más de diez años se curó en el campo.
Tengo mi propio pequeño huerto, un pequeño huerto, muchos perros y gatos, gallinas, patos y gansos, además de cabras lecheras. Autosuficiente, relajado y ocupado.
No tengo que tratar con nadie, no tengo que lidiar con el bien y el mal, no tengo que socializar, solo vivo con las pequeñas bellezas todos los días.
Poco a poco encontré el sentido de vivir y no necesitaba drogas para mantener mi estado mental.
En tu tiempo libre podrás pescar, tomar fotografías y contemplar el amanecer y el atardecer.
Pasear al perro, jugar con el gato, alimentar a las ovejas.
Sin presiones mundanas, sin acoso.
Duerme hasta despertarte de forma natural todos los días sin preocuparte de que te regañen por llegar tarde.
Aprendí a amarme y proteger mis emociones.
Aprendí a ahorrar dinero y a tener cuidado con las necesidades diarias.
Cuando no tengas nada que hacer en otoño, simplemente recoge un poco de leña para prepararte para el invierno.
Juega a su juego favorito con el perro.
Solía ser un fotógrafo sincero y aterrador porque era demasiado obsceno. Después comencé a poder captar mi atención y tomé más fotografías.
Soy feliz cuando hago fotos para otros, y los demás también lo son, porque lo disfruto y ella no tiene que gastar dinero.
El campo me ayudó a encontrar una razón para vivir, le dio sentido a mi vida y curó mis muchos años de dolor.
Arriba.