Conceptos básicos de la fotografía de retrato
1. Toma fotografías en primeros planos
Cuantas más partes haya en la foto, más elementos habrá que controlar y por supuesto más difícil será la composición. Se recomienda acercarse lo más posible al sujeto y tomar decisiones audaces. Los personajes de la imagen serán más llamativos, lo que naturalmente aumentará el atractivo visual.
Modo manual, F2.8, 1/800s, ISO 100, distancia focal 200 mm.
2. Elija diferentes ángulos de visión
Al tomar retratos, es natural utilizar un ángulo al nivel de los ojos como altura de disparo. Este es también el ángulo de disparo más básico. Para que la imagen se vea mejor o para agregar algo de diversión creativa personal, puede intentar disparar desde una vista de pájaro o desde una vista de pájaro. Intente cambiar el ángulo y, a menudo, podrá obtener diferentes estilos de fotografía.
Modo manual, F2.8, 1/60 seg, ISO 100, distancia focal 30 mm.
3. Preste atención a la luz de relleno al disparar con luz de fondo.
Al tomar retratos con luz de fondo, la luz del sol transmitirá hermosos contornos y una luz fina en la silueta del personaje. Puede evitar el problema de las caras oscuras utilizando reflectores y flashes para rellenar la luz o activando la función de optimización automática del brillo incorporada en la cámara.
Prioridad de apertura, F2.8, 1/200 segundo, ISO 160, distancia focal 150 mm.
4. Presenta imágenes dinámicas sin restricciones.
Los retratos dinámicos darán a las personas una sensación de libertad y una sensación muy natural. Las fotografías dinámicas se dividen en dos categorías. Una consiste en utilizar un obturador de alta velocidad para congelar la pose momentánea. La otra es seguir el disparo con una velocidad de obturación de 1/30 de segundo a 1/60 de segundo, utilizando el fondo borroso horizontalmente para expresar la sensación de velocidad de manera más efectiva.
Modo manual, F8, 1/60/60 segundos, ISO 400, distancia focal 50 mm