La composición de la lluvia otoñal en la presa el tercer día de la escuela secundaria
La lluvia de primavera es esperanza, la lluvia de verano es pasión; la nieve del invierno es romance y la lluvia de otoño puede ser un toque de tristeza. Se supone que el otoño es la temporada de cosecha, pero no sé por qué pero hay un toque de tristeza.
Sostén un paraguas y pasea por la orilla del río Amarillo. Caminando sin rumbo. Fuera del paraguas, llueve interminablemente otoñal, y en mis oídos se oye el susurro del viento otoñal. Las hojas doradas del otoño revolotean con el viento y la lluvia. Como resultado, la estrecha carretera asfaltada parece una fina alfombra dorada.
En las hojas de otoño que vuelan por todo el cielo, me parece ver mi infancia inocente, el otoño de mi infancia, que fue el momento más feliz en esta estación de hojas que caen. Arrastrando un cable largo, bajo el viento y la lluvia del otoño, se ensartaron hileras de hojas caídas, se arrastraron detrás del cuerpo flaco y se apresuraron a casa cuando se elevó el humo. El montón de hojas caídas, después de secarse, se convertía en volutas de humo en la cocina de mi madre.
El sonido de la lluvia es cada vez más fuerte y las hojas de otoño tiemblan con el viento y la lluvia. Todavía a ambos lados del terraplén de hierba, los niños que pastoreaban el ganado se preparaban para volver a casa. En el pueblo cercano al terraplén, la lluvia otoñal dispersaba el humo de la cocina sobre los tejados bajos de adobe. En el callejón embarrado, sonó la voz de una madre que llamaba a sus hijos para que fueran a casa a cenar. La amable llamada resonó en el viento otoñal, en la lluvia otoñal y en el pintoresco terraplén durante mucho tiempo.
El llamado de la madre, el eco del niño y el croar de las vacas forman un hermoso paisaje rural. En esta tarde de otoño, mi corazón está borracho, borracho en el humo volumétrico, borracho en el pintoresco campo, borracho en el viento y la lluvia otoñales ilimitados...