En la atención médica de la medicina tradicional china, "nutrir el yang en primavera y verano, y nutrir el yin en otoño e invierno"
Desde el punto de vista de la salud, el otoño es una buena estación para el cuidado de la salud, especialmente el equinoccio de otoño. La mitad del Qi y la sangre de una persona están afuera y la otra mitad adentro, por lo que el otoño es la mejor época para salir. Ayuda a que el Qi y la sangre fluyan de adentro hacia afuera y de afuera hacia adentro. Los seres humanos son criaturas que viven en el ambiente natural, por lo que la atención médica no debe violar esta ley ambiental. Esta ley sin duda lo castigará si la viola. No hay duda al respecto.
Los complementos alimenticios son especialmente importantes para el mantenimiento del otoño. Puede comer más verduras, aumentar adecuadamente el pescado, la carne magra, los huevos y otros alimentos. También puede comer más pollo, tortuga de caparazón blando, tortuga, longan, lichi, carne de nueces, hongos y otros alimentos. Estos alimentos son ricos en proteínas, grasas, carbohidratos, calcio, fósforo, hierro y otros nutrientes. No solo pueden reponer las calorías consumidas debido al frío en invierno, sino que también nutrin el qi, la sangre y las deficiencias, y son especialmente adecuados para el. débil.
El qi pulmonar es fuerte en otoño. La medicina tradicional china cree que "el qi pulmonar excesivo inhibe la madera del hígado, por lo que la acidez puede fortalecer la madera del hígado" y la "nutrición agridulce". Por lo tanto, comer alimentos más ácidos puede estimular al cuerpo a secretar más fluidos corporales, logrando así el propósito de reducir la sequedad e hidratar los pulmones. Durante la semana, puedes agregar más vinagre a tus comidas. El espino, la pasta Qiuli y el pomelo también son alimentos ácidos que nutren el yin e hidratan la sequedad.
Además, come alimentos de más fácil digestión en otoño. Lo mejor es blanquear las verduras antes de comerlas y comer menos alimentos crudos y fríos como las ensaladas. La sandía, el melón y otras frutas frías pueden dañar fácilmente el yang del bazo y del estómago, por lo que puedes comer manzanas, uvas y naranjas con moderación.