¿Comer barbacoa y beber cerveza es perjudicial para la salud?

Durante el proceso de barbacoa, no sólo se reduce la tasa de utilización de proteínas en los alimentos, sino que también se produce el carcinógeno benzopireno. Y las mutaciones genéticas producidas por la descomposición de los ácidos nucleicos de la carne también pueden provocar cáncer. Cuando el consumo excesivo de alcohol aumenta los niveles de plomo en sangre, la combinación de las sustancias anteriores en los alimentos a la parrilla puede inducir fácilmente tumores del tracto digestivo. Además, debido a la gran cantidad de alcohol que se consume en verano, la probabilidad de inducir esta enfermedad suele ser mayor.

Aunque el alcohol en sí no es carcinógeno, tiene un evidente efecto carcinógeno auxiliar. En primer lugar, el alcohol es un disolvente orgánico que puede dilatar los vasos sanguíneos del tracto digestivo y disolver la mucina en la superficie de la mucosa del tracto digestivo, lo que hace que el cuerpo absorba fácilmente los carcinógenos. En segundo lugar, el alcohol reduce la función de desintoxicación del hígado y favorece la acción de los carcinógenos. Además, el alcohol también puede suprimir la función inmune del cuerpo y mejorar la activación de carcinógenos. Por tanto, lo mejor es beberlo con moderación.

La carcinogenicidad de la comida a la barbacoa está relacionada con la cantidad de comida consumida. Se recomienda que la comida no se consuma más de dos veces por semana, y cada vez no supere los 100 g.