La dietoterapia de la MTC siempre ha abogado por nutrir huesos con huesos. ¿Qué huesos de animales se utilizan habitualmente en la terapia dietética?
En segundo lugar, los huesos de res a menudo se comen como cecina de res. El "Compendio de Materia Médica" registra que los huesos de res tienen un sabor dulce y una naturaleza cálida, y tienen el efecto de tonificar el yang y fortalecer los músculos. Los huesos de res contienen ácidos grasos insaturados, colágeno, condroitina, metionina, vitaminas del grupo B y vitamina D, que son indispensables para el cerebro y pueden prevenir el envejecimiento de los huesos humanos. Los huesos de ternera son especialmente adecuados para personas de mediana edad y mayores que padecen osteoporosis. A menudo puedes comer sopa de zanahoria y huesos de res para nutrir tus huesos. 200 gramos de huesos de res, 50 gramos de ajo, 50 gramos de zanahorias y la cantidad adecuada de sal. Rompe los huesos de res con un cuchillo grande y límpialos con agua del grifo; pela las zanahorias y los ajos, lávalos y córtalos en tiras. Primero cueza los huesos de res en una olla, luego agregue rápidamente sal, ajo y zanahorias hasta que las verduras estén suaves y tiernas.
En tercer lugar, los huesos de cerdo se suelen comer con costillas y rótulas. Los huesos de cerdo son de naturaleza cálida, de sabor dulce y salado, entran en el meridiano del bazo, el hígado y la vesícula biliar y tienen muchas funciones, como fortalecer los huesos humanos, tonificar el bazo, humedecer el tracto gastrointestinal, promover la producción de líquidos e hidratar la piel. Las personas mayores con osteoporosis y fracturas fáciles pueden comerlo con regularidad. 150 gramos de huesos de cerdo y 50 gramos de ñame fresco. Remojar los huesos de cerdo en agua durante diez minutos, luego quitarles la sangre, luego guisarlos en agua, agregar rápidamente las rodajas de ñame picado y guisar hasta que los huesos de cerdo estén suaves y tiernos.
Hay que tener en cuenta que no todas las personas mayores son aptas para el mantenimiento óseo. A las personas resfriadas y con fiebre y a las infectadas con el virus de la gastroenteritis aguda no se les permite utilizar huesos para nutrir sus huesos. Para los pacientes con fracturas, no es adecuado comer sopa de huesos en la etapa inicial, pero pueden comer una pequeña cantidad de alimentos en la etapa posterior, y comerla en la etapa posterior puede lograr muy buenos efectos terapéuticos.