¿Cómo solucionar el problema del humo negro al quemar leña en una caldera pequeña?
Podemos reducir la generación de humo negro desde los siguientes aspectos. En primer lugar, a la hora de elegir leña, debemos intentar elegir algunas ramas muertas que hayan estado expuestas al sol durante mucho tiempo. Estas ramas muertas son inflamables y no emitirán humo negro. Si las ramas se queman antes de que estén secas, será difícil que el fuego arda. El agua necesita evaporarse para arder, lo que producirá una gran cantidad de monóxido de carbono y dióxido de carbono. Por eso intentamos elegir ramas más secas para quemar, para evitar la producción de humo negro. Otra cosa es que necesitamos algunas habilidades para preparar leña durante el proceso de combustión. Intente colocar toda la leña de manera que queden espacios entre la leña y la leña. Esto puede aumentar el área de contacto con el oxígeno y ayudar a la combustión. Esto también puede evitar la generación de humo negro, maximizar el uso de materiales en combustión y evitar el desperdicio de materiales. Otra forma de aumentar el contacto entre el combustible y el aire es permitir que entre más aire al combustible durante el proceso de combustión. ¿Cómo hacemos esto? Podemos utilizar un ventilador o ventilador pequeño para ayudar a avivar la llama, de esta manera la llama arderá más rápido y evitará la producción de humo negro.
Sin embargo, se producirá algo de humo negro al quemar leña en una caldera pequeña, por lo que es mejor no quemar leña en una caldera pequeña si las condiciones lo permiten. La quema de leña no sólo contamina el aire, sino que también daña la vegetación forestal.