Quita las fotos y deja huellas.
Amo la naturaleza. Cuando me enfrento a hermosos paisajes, no puedo evitar tomar fotografías para registrar los hermosos momentos y congelarlos en la eternidad. No sólo deleita el cuerpo y la mente, sino que también mejora los logros artísticos y el gusto estético.
Pero a menudo vemos comportamientos incivilizados al tomar fotografías: hacer ruidos fuertes en lugares pintorescos, destruir la atmósfera tranquila y elegante y no tener en cuenta los sentimientos de otras personas al tomar fotografías, entrar en áreas deshabitadas o molestar bruscamente a los demás; los disparos de la gente, o mirar fijamente una atracción durante mucho tiempo, ignorando por completo a las personas que esperan a tu lado. Un comportamiento tan incivilizado es incompatible con la búsqueda y apreciación de las cosas bellas.
Los fotógrafos deben respetar conscientemente las normas civilizadas al tomar fotografías en lugares pintorescos y tomar fotografías que registren momentos hermosos y dejen huellas. Este debería ser un enfoque básico para los fotógrafos.