¿Cómo se deben mantener las patrullas?
Antes de utilizar una patrulla eléctrica, preste atención para comprobar si el coche está en buenas condiciones, como si la presión de los neumáticos es suficiente, si los frenos delanteros y traseros son sensibles, si el vehículo tiene alguna anomalía, si los tornillos están flojos y si la batería está completamente cargada. Cuando la patrulla eléctrica recién arranca, debe acelerar lentamente para evitar aceleraciones repentinas y daños a los componentes. Para prolongar la vida útil de la batería y el motor, la patrulla eléctrica utiliza la potencia del pedal al arrancar y subir colinas. Bajo la premisa de garantizar la seguridad, intente reducir las frenadas frecuentes y empezar a ahorrar electricidad. Tenga cuidado de no utilizar cargadores de otras marcas al cargar. Cada marca de cargador coincide con el rendimiento de la batería y solo un cargador dedicado puede lograr el mejor efecto de carga. El cargador contiene cables de alto voltaje, no lo desmonte sin autorización. Al cargar la patrulla eléctrica, el cargador no se puede tapar con nada y se debe colocar en un lugar ventilado. Al mismo tiempo, tenga cuidado de evitar que entren líquidos y partículas metálicas en el cargador, así como de caídas e impactos que puedan causar daños. Está estrictamente prohibido almacenar la batería de la patrulla en estado desenergizado. El estado de batería baja significa que la batería no se carga a tiempo después de su uso. Cuando la batería se almacena en un estado de bajo consumo, se sulfata fácilmente. Los cristales de sulfato de plomo se adhieren a las placas de los electrodos y bloquean los canales iónicos, lo que provoca una carga insuficiente y una disminución de la capacidad de la batería. Cuanto más tiempo permanezca inactiva la batería, más graves serán los daños. Por lo tanto, cuando la batería está inactiva, cargarla una vez al mes puede mantener mejor la salud de la batería.