¿Por qué la gestión de riesgos en la industria turística de Tailandia no puede mantenerse al día?
Este es el incidente de seguridad turística más grave en la historia de Tailandia. La gobernadora de Phuket, Noora Fatt, dijo que "las víctimas fueron inesperadas". Viendo el asunto, los mayores reproches son sin duda las navieras y agencias de viajes implicadas que "ignoraron las advertencias". Pero también hay que señalar que detrás de esto está el trasfondo insatisfactorio de la gestión de riesgos turísticos en los destinos turísticos, y el accidente también proporciona cierta evidencia del coeficiente de riesgo turístico de Tailandia.
Hablando de "coeficiente de riesgo de viaje", en junio de este año, la compañía británica de seguros Endsley acaba de incluir a Tailandia como el destino turístico más peligroso del mundo. Anteriormente, el sitio web de viajes SafeAround clasificó a Tailandia en el puesto 91 (de 162) en el "Ranking de seguridad global" con cuatro categorías: "riesgo general", "riesgo de fraude", "riesgo de tráfico y taxis" y "riesgo de desastres naturales". Todos los coeficientes son "altos".
Esto es sólo un reflejo de que la gestión turística de Tailandia no puede seguir el ritmo de la grave situación de seguridad turística. En primer lugar, el crimen organizado en algunas atracciones turísticas no ha sido bien controlado, y los problemas de seguridad en las "Cuatro Prefecturas del Sur" y las zonas fronterizas entre Tailandia y Myanmar son "un problema constante". Incluso en zonas relativamente seguras, el problema del aumento de los carteristas en las atracciones turísticas no se ha controlado durante mucho tiempo.
En segundo lugar, algunos proyectos turísticos con riesgos evidentes para la seguridad han sido "grises" durante mucho tiempo. Anteriormente, los turistas chinos se topaban con frecuencia con viajes en grupo a Tailandia. El "horror de los cruceros" ya no es noticia. Muchas "agencias de viajes terrestres" bajo el lema "Agencia de viajes de Tailandia" son en realidad organizaciones e individuos chinos con una nueva cara, y también hay algunas empresas e individuos locales de origen desconocido que están "al margen".
Esto no quiere decir que Tailandia no preste atención a la gestión de la seguridad turística. Ya en 1959, Tailandia estableció una agencia especial de promoción del turismo y promovió una serie de leyes relacionadas con el turismo, que alguna vez se consideraron "con visión de futuro" entre los países del Sudeste Asiático. Sin embargo, es un hecho indiscutible que sus problemas de gestión turística son destacados, lo que también está relacionado con su gestión aparentemente laxa.
Tailandia es el país con más accidentes de tráfico y la mayor tasa de mortalidad por accidentes del Sudeste Asiático. Detrás de escena está la implementación ineficaz de las leyes y reglamentos pertinentes y la minimización de las sanciones por accidentes.
En este incidente, aunque Tailandia emitió un fuerte aviso de viento y oleaje dos días antes del incidente, el puerto no tomó medidas efectivas para evitar que el crucero abandonara el puerto. Los testigos afirmaron que muchos barcos con el factor de seguridad más bajo también se hicieron a la mar en mayo y junio sin encontrar obstáculos. Por supuesto, los operadores que se aventuraron a salir del puerto deben ser los principales responsables, pero también tienen la culpa porque sólo avisaron a las agencias gestoras que no los detuvieron, sabiendo que hacerse a la mar era arriesgado.
No hay motivos para una gestión laxa: en primer lugar, desde las dos crisis financieras de Asia y el Pacífico, Tailandia ha considerado la industria del turismo como un "grupo de seguros" para cubrir los riesgos económicos internacionales. En 2017, el número de turistas extranjeros alcanzó los 35 millones, lo que equivale a la mitad de la población total de Tailandia. La rápida expansión de la presión turística ha provocado un grave "retraso" en las políticas de gestión, los recursos, el software y el hardware, y ha superpuesto riesgos de seguridad sistémicos. Debido a la preocupación de que "pisar el freno" afecte a la economía nacional, es difícil para los gobiernos locales lograr mejoras cualitativas en la gestión. En segundo lugar, Tailandia es una zona propensa a sufrir desastres naturales, pero su capacidad para responder a ellos es insuficiente.
Para Tailandia, el accidente del barco que zozobró en Phuket nos recuerda que la mejora de la situación de seguridad turística no puede ser temporal, parcial o limitada. En cuanto a los turistas nacionales, también conviene considerar su propia seguridad. "Es difícil sentarse en una sala con mucho dinero." No es en absoluto innecesario tener más previsión de riesgos y más capacidades de cobertura.
Fuente: Noticias de Beijing