¿Dónde has estado escribiendo durante el verano?
El Museo de Ciencia y Tecnología está en Pudong, Shanghai. El metro llevó mi corazón alegre hasta la estación del Museo de Ciencia y Tecnología de Shanghai. Nada más salir de la estación de metro, me llamó la atención un magnífico edificio en forma de abanico. El centro de este edificio es una enorme esfera de vidrio, con dos edificios en forma de abanico que se extienden hacia afuera desde ambos lados de la esfera, como dos grandes alas que crecen en la esfera. La fachada del edificio es de cristal y brilla con la luz del sol. Este es el Museo de Ciencia y Tecnología de Shanghai.
¡Cuántas personas nos visitaron hoy! Seguí a la multitud hasta el Área Biológica de Vientiane del Museo de Ciencia y Tecnología y entré en el área. ¡Guau! El hermoso paisaje frente a mí me sorprendió: un colorido mundo biológico se desarrolló ante mis ojos. Mientras caminábamos entre las montañas y el agua corriente, mirábamos las plantas en la selva tropical y escuchábamos el canto de los pájaros de vez en cuando. Esto me dio una comprensión completa de los coloridos fenómenos de la vida y me hizo sentir como si fuera yo. Había entrado en un área escénica natural primitiva.
Dejé Biological Vientiane y fui al área de exhibición de Robot World, ¡oye! ¿De dónde vino la música de piano aquí? Lo escuché y miré a mi alrededor. Resulta que el robot músico toca vívidamente para todos. ¡maravilloso! ¡Mira, el robot de allí es aún más poderoso! Estaba jugando ajedrez con un niño de todo corazón. Al ver el rostro del niño lleno de ansiedad y sudor, pensé que debía ser mejor que el robot. ¡Hay tantos robots aquí! Sin embargo, lo más llamativo es el teatro de robots. Todos iban vestidos con ropas hermosas, con sombreros modernos en la cabeza y un pequeño paraguas en la mano. Bailaron al son de la música y desde la distancia parecían un grupo de hermosas niñas. A través del mundo de los robots, visitamos la era de la información, la luz de la exploración, el universo...
Esta visita no sólo me hizo pasar un día feliz, sino que también amplió mis horizontes y entendí el mundo que me rodea. Varios misterios científicos me hicieron comprender que cada uno de nosotros debería amar la ciencia, aprenderla y aplicarla. Dejemos que la ciencia nos haga mayores contribuciones. Es una pena que no hayas competido con el robot por el cubo de Rubik.