La nueva casa está decorada al estilo francés. ¿Qué te parece?
Si estás decorando tu segunda vivienda, lo más importante que no puede faltar es el estilo francés vintage. La primera opción será el artículo de bonificación. Así como el tiempo nunca derrotará a la belleza, el estilo francés vintage se volverá cada vez más atractivo con el tiempo. Los muebles retro, las paredes de color amarillo oscuro y los papeles pintados de flores y pájaros de estilo oriental están llenos de arte romántico. El porche de entrada está pavimentado con azulejos de color amarillo mostaza que calientan todo el porche. Los zapateros, los bancos y los azulejos amarillos de color violeta claro crean una atmósfera hermosa y misteriosa.
El papel pintado es el protagonista del salón. Los fondos de pantalla personalizados hechos a mano presentan hermosas descripciones. Los pájaros, flores y macetas de las pinturas tienen diferentes formas y posturas, y los patrones orientales son ricos y coloridos. Me encanta coleccionar muebles antiguos que combinen con los cuadros decorativos para crear un espacio acogedor y lleno de romance. Ventanas transparentes Las ventanas de la sala de estar también pueden ver la naturaleza tranquila, lo que hace que la gente se relaje y sea feliz. Las plantas y flores verdes también son una parte importante de esta familia. No son necesidades de la vida, pero brindan gran satisfacción a las personas.
Es un placer ver plantas verdes frescas y flores en flor en tu casa todos los días. Con cálidos suelos de madera, una casa pequeña tiene un hermoso soplo de vida. En general, la gente se siente cómoda sin sensación de distancia, pero cada detalle es cómodo y exquisito. Es una verdadera pieza de decoración del hogar que encarna el espíritu francés de elegancia sin esfuerzo. El estilo decorativo francés da a la gente una sensación más romántica. El estilo de decoración francés está lleno de retro y un toque superficial. Este es un tono naturalista, pero resalta la nobleza. De hecho, también refina el estilo campestre y tiene una concepción artística similar a la de un jardín de melocotoneros.
El carácter introvertido y las costumbres únicas de la campiña francesa, con el blanco, el oro y la madera oscura como colores protagonistas. La estructura del espacio abierto, las flores y plantas verdes por todas partes y los muebles bellamente tallados generalmente crean una atmósfera pastoral. El estilo francés se centra en la decoración arquitectónica en la naturaleza, enfatizando el regreso de la naturaleza en el alma del diseño, brindando a las personas un rico encanto.