Escritos sobre viajes a Japón

La composición de las notas de viaje a Japón es la siguiente:

Xiao Ming tuvo la suerte de viajar a Japón, lo cual fue una experiencia inolvidable. Xiao Ming visitó muchas atracciones famosas, probó comida deliciosa y sintió la atmósfera cultural única de Japón.

Al principio, Xiao Ming vino a Tokio. Como capital de Japón, Tokio está llena de modernos edificios de gran altura y calles concurridas. Xiao Ming visitó la Torre de Tokio y disfrutó de la vista panorámica de la ciudad. Por la noche, Xiao Ming también fue a Kabukicho en el distrito de Shinjuku para sentir el encanto de esta animada zona de vida nocturna.

Más tarde Xiao Ming fue a Kioto, una ciudad llena de patrimonio histórico y cultural. Xiao Ming visitó el Templo del Pabellón Dorado, cuyo techo dorado brillaba bajo el sol. Xiao Ming también visitó templos famosos como el Templo Qingshui y la Sociedad Fujian Daohe para sentir su atmósfera antigua y misteriosa.

Xiao Ming también viajó a Nara, la capital tradicional de Japón. En el parque Nara, Xiao Ming vio muchos ciervos libres. Tuvieron un estrecho contacto con los turistas, formando un paisaje único. Xiao Ming también visitó un templo budista y quedó profundamente impactado por la enorme estatua de bronce de Buda.

En cuanto a la comida japonesa, Xiao Ming ha probado muchos platos deliciosos. Xiao Ming probó delicias tradicionales como sushi, ramen y barbacoa, y todas sabían deliciosas. Xiao Ming también aprendió sobre la ceremonia del té japonesa y la cultura del kimono, y sintió el énfasis del pueblo japonés en los detalles y la tradición.

El origen de Japón

Según documentos históricos como "Las Crónicas de Japón", el origen de Japón se remonta aproximadamente al año 660 a.C. Según antiguas leyendas, el emperador Jimmu (el primer emperador de Japón) llegó a Japón desde Takatengen (un mundo mítico) y comenzó la historia de Japón.

Los historiadores generalmente creen que los orígenes históricos de Japón son en realidad anteriores, con una antigua sociedad tribal. Los descubrimientos arqueológicos muestran que el archipiélago japonés estuvo habitado ya en el Paleolítico Superior, desde el 654,38 millones a.C. hasta el 30.000 a.C. Más tarde, aparecieron los Erectus del Paleolítico Superior y los primeros aborígenes.

En el período Yayoi, del siglo III a. C. al siglo III d. C., la cultura agrícola comenzó a surgir en el archipiélago japonés. Durante este período, la gente comenzó a cultivar arroz, utilizar alfarería y establecer organizaciones sociales y residencias.