Avería en chimenea de caldera mural de gas
1 Obstrucción del conducto de humos: el conducto de humos y el conducto de humos dentro de la caldera mural pueden estar bloqueados por polvo, aceite o carbón. depósitos y otros desechos, lo que resulta en la transferencia de calor. Si no es bueno, el escape de humo se bloqueará, lo que afectará el efecto de combustión del horno.
2. Obstrucción de la chimenea: La chimenea está bloqueada por nidos de pájaros, hojas caídas, humo espeso y otras sustancias, lo que impide la salida normal de humos del interior. También provoca que la caldera mural se queme de forma incompleta y con frecuencia. apagar la llama.
3. Tuberías rotas: Las tuberías de la caldera mural de gas se dañarán debido a un mal sellado o al uso prolongado, lo que provocará que el humo no se pueda descargar con suavidad, provocando humo en la habitación. .
Para evitar esta situación podemos tomar las siguientes medidas:
1. Limpiar periódicamente el conducto de humos y el tubo de la caldera mural para mantenerlo liso.
2. Instale dispositivos de protección, como cubiertas para pájaros y cubiertas para la lluvia, para evitar que entren residuos en la chimenea.
3. Compruebe periódicamente el sellado de la tubería y reemplácela a tiempo si hay algún daño.
En definitiva, el mantenimiento y reparación periódica de las calderas murales de gas es necesario para alargar su vida útil, reducir la probabilidad de averías y mejorar la calidad del ambiente del hogar.