Red de conocimientos turísticos - Pronóstico del tiempo - ¿Qué tamaño tiene la manada? ¿Cómo agrupar los lechones?

¿Qué tamaño tiene la manada? ¿Cómo agrupar los lechones?

El número de cerdos por grupo depende de factores como el equipamiento del alojamiento, la densidad del alojamiento, los métodos de alimentación y el tipo de grupo de cerdos. En circunstancias normales, los verracos y las cerdas se mantienen en corrales individuales al final de la gestación, con 2-3 cerdas y 3-5 cerdos de reemplazo al principio de la gestación. El número de cerdos de engorde por corral se puede aumentar adecuadamente. En condiciones domésticas, son adecuadas de 10 a 15 cabezas para cada grupo, y cada cabeza ocupa un área de 0,8 a 1,0 metros cuadrados. Mantener demasiadas cabezas en cautiverio y en una densidad demasiado alta puede provocar peleas, afectando así el efecto de engorde.

A la hora de agrupar cerdos, lo mejor es agrupar cerdos con origen, raza, peso, físico, fuerza e ingesta de alimento similares. Las diferencias de peso individuales del mismo grupo de cerdos no deben ser demasiado grandes. La diferencia de peso de los lechones en la etapa de lechones no debe exceder de 4 a 5 kg, y la diferencia de peso de los lechones a mediano plazo no debe exceder de 7 a 10. kilogramos. Después de la agrupación, el grupo de cerdos debe mantenerse relativamente estable. Para evitar que los cerdos muerdan y ataquen a las personas debido al pastoreo, durante el pastoreo se suelen utilizar métodos como "dejar a los débiles y no a los fuertes", "eliminar a los grandes pero no a los pequeños" y "no combinar día y noche". , es decir, los cerdos más débiles se mantienen en el corral original, fusionar los cerdos más fuertes; o dejar menos cerdos en el corral original y fusionar más cerdos, o fusionar los dos grupos de cerdos y llevarlos a otro corral; para fusionarse por la noche, también puedes rociar a los cerdos con algo que huela igual, como Lysol, para que los olores de los cerdos sean similares entre sí y difíciles de distinguir. Tras la fusión, los directivos deberán reforzar la atención, la gestión y la formación en los primeros días para evitar o reducir la aparición de peleas.