Si la luz está rota, comuníquese con el propietario o arréglela usted mismo.
La "Ley de Derechos de Propiedad" estipula que el arrendador es responsable del mantenimiento de la casa y de las instalaciones auxiliares, es decir, salvo acuerdo especial en el contrato de arrendamiento, del mantenimiento de las lámparas y. otras instalaciones auxiliares deben ser responsabilidad del propietario. El propietario tiene un conocimiento más profundo de la estructura y las instalaciones de la casa y tiene más experiencia y recursos para afrontar los problemas. El arrendador dispone de las herramientas, accesorios o personal de mantenimiento profesional necesarios para solucionar el problema de forma más rápida y eficaz.
Si los inquilinos realizan las reparaciones ellos mismos, el funcionamiento inadecuado puede provocar más daños u otros riesgos de seguridad. Si el inquilino no repara la propiedad adecuadamente, también puede dar lugar a disputas con el propietario o responsabilidades poco claras.