¿Cómo se dispara el arma?

Cuando se dispara, el percutor instalado en el cerrojo golpea el cebador del proyectil, encendiendo el propulsor. La combustión del propulsor produce una gran cantidad de gas (la presión generalmente es de aproximadamente 3×10 5 kPa), que empuja el proyectil hacia adelante a lo largo del orificio con una gran aceleración. El proyectil gana velocidad máxima cuando sale de la boca y luego vuela hacia el objetivo a lo largo de una trayectoria determinada. El gas empuja el proyectil hacia adelante, empujando el arma hacia atrás.

Un arma generalmente consta de un cuerpo de arma y un soporte de arma (tomemos un obús de cañón como ejemplo). El cuerpo del arma consta de un cañón, una cola, un cerrojo y un freno de boca. El cañón se utiliza para dar al proyectil la velocidad inicial y la dirección de vuelo, y hacer que el proyectil gire (los proyectiles de armas de ánima lisa generalmente no giran). La culata del arma se utiliza para asegurar el cerrojo. El cerrojo se utiliza para bloquear el orificio, disparar el proyectil y extraer el cartucho después del disparo. La mayoría de las armas modernas usan recámara semiautomática y algunas usan recámara automática.