Reseñas de la película Fausto
El comienzo de "Fausto" es muy impactante. Vemos el fuego saliendo del infierno en la música de la ópera de Grand Gounod. Del mismo modo, el ángel muestra el mundo humano al diablo. La forma y los efectos de iluminación del Fausto de pelo blanco reflejan la búsqueda del director por la composición y la fotografía. La toma cenital del modelo realizada por Karl Hoffman permite que la figura gigante del diablo cubra la mitad de la pantalla, y la música inquietante y su ferocidad aumentan el terror previo a la plaga. Estos modelos de yeso, debido a la precisión de su iluminación, se convirtieron en modelo para la fotografía expresionista. Esta película tiene asientos muy flexibles. La cruz en su espalda nos muestra la majestuosidad de la religión, pero aun así el diablo mató al sacerdote que oraba desesperadamente. A partir de entonces, su comportamiento de quemar libros reflejó sus dudas acerca de Dios. En la toma de convocar al diablo en la encrucijada, ¡los efectos especiales del aura nos permiten ver la aplicación de múltiples exposiciones! Además, el uso extensivo de estética visual expresionista, como la retroiluminación y la medición, permite al público ver los puntos clave a la vez y no puede evitar sorprenderse. La música y la imagen se vuelven un todo, creando el terror de los relámpagos y los truenos. Especialmente la luz en los ojos del diablo llena de miedo a la gente. El hecho de que las películas de la década de 1920 tengan tal estimulación sensorial demuestra el ingenio creativo del director. La aparición del reloj de arena en la mano de Mephisto y la transformación del diablo fueron todas innovaciones del año. La escena en la que Fausto se hace joven está llena de efectos especiales y es muy interesante. También hay una escena de desnudo. La escena donde el Diablo baila con Fausto es muy poética. Para transmitir la altura se utilizó la silueta de un águila calva, completando la representación vista en la película. La grandeza de la escena de la boda no es menor que la de cualquier epopeya. El uso del montaje de cruces en la iglesia nos muestra el poder de la fe y el miedo al diablo. Estas imágenes creadas por la luz transmiten de forma muy sutil el entorno y los sentimientos internos de los personajes.
La parte más relajada de la película es la sección con Marshall Menstruation, y la música también tiene un aire cómico. Y hace que Fausto y la muchacha se encuentren de forma poética y amorosa. Este pasaje contiene algunos elementos llamativos y es una crítica al historiador de cine Sadur. Sin embargo, el uso de música de ópera en la película hace que el sonido y la imagen estén muy unificados. En la escena donde la niña muere congelada en la nieve, hay una escena de alucinación que es muy trágica: la niña fantasea con mecer una cuna para cuidar a su bebé, pero en realidad, la nieve la está sumergiendo lentamente. Esta imagen tiene un gran impacto en los corazones de las personas. Las tomas superpuestas de Fausto y las tomas destacadas de la niña en la escena del incendio muestran la riqueza del lenguaje fotográfico del director y su exploración del mismo.
Al final, la película está llena de redención. Cuando Dios le dijo al diablo que el único poder para salvar al mundo proviene del "amor", apareció en la pantalla una palabra enorme "amor", permitiendo a la audiencia ver la posibilidad de la salvación.