Fotografía de Lacey Time

Al final del viaje, se desploma en el suelo, cubierto de nieve blanda, y yace cansado bajo la cálida manta blanca. Llegó a la puerta de la escuela del pequeño maestro, el lugar donde esperaba al niño todas las tardes a las cuatro. La fatiga le ha impedido levantar la cabeza y su cola rota está cubierta de espinas y berberechos.

Aquí está, cumpliendo la promesa de la infancia...