Formas básicas de negociación de acciones
Como herramienta de inversión, el swap es flexible y conveniente. La última aplicación de los swaps es convertir los ingresos de cualquier activo existente en los ingresos de otro activo, sin implicar el costo de la transacción física. Los pagos mutuos de un swap se pueden realizar en cualquier moneda, independientemente de la moneda en la que esté denominado el índice bursátil. Por ejemplo, cuando un inversor estadounidense intercambia flujos de efectivo LIBOR en dólares estadounidenses por el correspondiente índice DAX alemán, el pago en moneda puede ser en dólares estadounidenses o en marcos alemanes. En ocasiones también se puede ajustar el importe del principal nominal.
Así, en la década de 1990, los acuerdos de intercambio de acciones eran una importante herramienta de asignación de activos para los gestores de inversiones. A continuación enumeramos algunos elementos básicos de los swaps de acciones: Plazo: de 3 meses a 10 años.
Principal nominal: más de 654,38+ millones de dólares estadounidenses.
Pagador de activos accionarios: institución financiera.
Activos bursátiles: un determinado índice bursátil, cesta de índices, cesta de acciones, etc. , puede tener un precio en cualquier moneda y puede estar cubierto o no cubierto.
El pagador del activo circulante: los inversores.
Activos flotantes: Valores de renta fija o carteras de valores, y otros activos de renta variable que paguen intereses flotantes o fijos en cualquier momento, en cualquier moneda y con cualquier frecuencia.
Frecuencia de pago: mensual, trimestral, anual o al vencimiento.
Base de ingresos: en función de los activos del swap, el período del contrato y la calificación crediticia de ambas partes, se agrega un ingreso a los ingresos de los activos accionarios o activos flotantes.