Al comienzo del mercado de valores chino, debido a cuestiones de propiedad, las acciones se dividían en acciones de personas jurídicas y acciones negociables. Para garantizar la "propiedad pública", el Estado debe tener una participación mayoritaria. Por tanto, se estipula que las acciones de personas jurídicas no pueden cotizar ni circular, y sólo pueden ser propiedad de accionistas mayoritarios, es decir, gestores de activos de propiedad estatal. Pero en términos de capital, es lo mismo que las acciones negociables y pueden recibir dividendos iguales y votar por igual. Posteriormente, entre las empresas cotizadas también aparecieron empresas no estatales, pero siempre se ha mantenido el sistema de acciones de personas jurídicas. Por lo tanto, objetivamente, las acciones negociadas en el mercado de valores son sólo acciones en circulación y representan sólo 1/3 del capital social total. Por lo tanto, las acciones negociables se pueden negociar en el mercado, lo que reduce objetivamente el capital social, por lo que el mercado les otorga una alta prima de liquidez y el precio de las acciones es mucho más alto que el de las acciones de personas jurídicas no negociables, incluso varias veces o decenas de veces. Sin embargo, esta división artificial del capital no favorece el desarrollo del mercado de valores, por lo que habrá un problema de "plena circulación".
El problema de la "plena circulación" es que el número de acciones en el mercado de repente se triplica. ¿De dónde vendrán los fondos para aceptar estas acciones? Al principio, como las acciones de personas jurídicas no podían cotizar en bolsa, los accionistas de acciones negociables estaban dispuestos a comprar acciones negociables a un precio elevado. Si cotizan acciones de personas jurídicas, será injusto para las acciones negociables.
La plena circulación es el objetivo de la reforma del comercio de acciones de mi país y una medida importante para garantizar el desarrollo normal del mercado de valores de mi país. La circulación total resuelve el problema de la dispersión compleja e irrazonable de la estructura accionaria de la empresa. Al fin y al cabo, todos los accionistas de la empresa están en la misma línea de partida. Relativamente hablando, los intereses de los inversores minoristas no son grandes, son sólo la contraprestación recibida, en lugar de maximizar los intereses de los accionistas de acciones no negociables. Es concebible que la plena circulación tenga un impacto negativo en el mercado de valores, no positivo.