Los productos de riesgo no son aptos para la venta personal.
Esto se debe a que los métodos de promoción de las personas son propensos a malentendidos y engaños, y los consumidores pueden ser engañados o engañados para comprar el producto, lo que resulta en riesgos y pérdidas innecesarios.
Por el contrario, los productos de alto riesgo deben promocionarse de una manera más justa y transparente, como transmitir información del producto y advertencias de riesgo a los clientes a través de publicidad, sitios web oficiales, manuales de productos, reseñas de clientes y otra información. Canales, para que los clientes puedan tener una comprensión y comprensión más completa y precisa, para que puedan elegir comprar o dejar de comprar.
Al mismo tiempo, para los productos de alto riesgo, las agencias reguladoras deben revisar y gestionar estrictamente los productos y fortalecer la supervisión de la calidad de los productos, la gestión de riesgos y la resolución de disputas.
Los siguientes son algunos productos de alto riesgo:
1. Acciones y fondos de acciones: los precios de dichos productos fluctúan mucho debido a la influencia del mercado y los riesgos son altos.
2. Transacciones de divisas: Debido a la volatilidad del mercado de divisas, las transacciones de divisas implican altos riesgos.
3. Futuros y opciones: Los precios de la negociación de futuros y opciones fluctúan mucho, por lo que los riesgos son altos.
4. Productos financieros innovadores: Los nuevos productos financieros, como los préstamos P2P y las monedas digitales, tienen una supervisión imperfecta y altos riesgos.