¿Cuál es la importancia del servicio público de alquiler de bicicletas lanzado en Nanning?
Construir una "Ciudad de las bicicletas"
Para promover aún más las bicicletas, Copenhague lanzó en 1995 un programa de alquiler de bicicletas a corto plazo llamado "City Bicycle". El plan espera equipar a las ciudades con suficientes bicicletas "inactivas" para cubrir las necesidades de viaje de "distancia adecuada". Más de 2.000 bicicletas blancas, claramente diferentes de las bicicletas normales, están distribuidas en 125 estaciones de bicicletas por toda la ciudad. Los usuarios pueden conseguir una bicicleta poniendo 20 coronas (unos 3,70 dólares) en una máquina tragamonedas y recuperar el depósito cuando devuelven la bicicleta. El programa se financia en parte con los ingresos de la publicidad en las bicicletas. Además de complementar la accesibilidad del transporte ferroviario, las autoridades de transporte público también esperan que el plan de "bicicletas urbanas" reduzca el número de bicicletas transportadas en los vagones del transporte ferroviario, proporcionando así más espacio para los pasajeros.
Para reducir las emisiones urbanas de gases de efecto invernadero, el gobierno de la ciudad de París lanzó en el verano de 2007 el plan "Ciudad de las bicicletas". A finales de 2007, había 20.600 bicicletas repartidas en 1.450 estaciones de alquiler de bicicletas recién construidas en París, ofreciendo servicios de alquiler de bicicletas casi gratuitos a los ciudadanos. Hay una estación de alquiler online cada 200 metros en la ciudad. Una vez alquilada, la bicicleta se puede devolver en cualquier estación de alquiler. Los ciudadanos que necesiten utilizar estas bicicletas sólo deberán proporcionar un depósito de 65.438+095 dólares estadounidenses o su tarjeta de crédito e información personal a la estación de alquiler con antelación. Las tarifas de las bicicletas dependen del tiempo. Si el tiempo de alquiler supera la media hora, la carga se duplicará cada 30 minutos para animar a las personas a aumentar la eficiencia de la bicicleta.
Nuestro país también está probando y explorando activamente las bicicletas públicas para que puedan desempeñar el papel que les corresponde en el transporte urbano. Después de pruebas y exploración, hemos acumulado una experiencia considerable y hemos desarrollado un sistema de gestión maduro de bajo costo y alta eficiencia que puede promoverse rápidamente. Por lo tanto, las preocupaciones de muchos administradores urbanos de que demasiadas bicicletas causen caos en el tráfico urbano pueden disiparse, porque las bicicletas públicas y las bicicletas de propiedad de los ciudadanos son completamente diferentes en naturaleza y gestión. Esta es la conclusión a la que se llegó después de que muy pocas operaciones de la ciudad lo hayan intentado.