Un ensayo sobre la descripción del paisaje de Zigui.
El viento frío pasó, el cielo se congeló y la vasta extensión estaba pálida. El cielo es blanco, un blanco infinito, que se extiende en la distancia. Tan pálido como la muerte.
El viento despiadado azota el bosque calvo. Es ruidoso y rugiente, y quiere declarar la guerra al mundo. Las confusas hojas caídas fueron arrastradas rápidamente por el fuerte viento, rodeando todo el bosque, círculo tras círculo.
El sol se ha ido para siempre. El sol ahora ya no calienta tanto como en verano. Es de un color rojo brillante y parece un poco pálido. Hacía un frío increíble, como si el sol en ese momento sólo pudiera traer luz a la tierra, pero no calor.
Los peatones en la vía tienen prisa y nunca se detienen. De vez en cuando pasaba un coche a toda velocidad, asustando a algunos gorriones en el bosque.
Lo mismo ocurre con los animales. Van y vienen a toda prisa, corriendo en busca de comida para el invierno. Los gansos han volado hacia el sur, las hormigas han preparado comida para el invierno y los osos han cavado. Es una cueva en hibernación, todo parece muy tenso.
El vapor de agua en el lago ha estado congelado durante mucho tiempo en una niebla. La fina y ligera niebla blanca lechosa que cubre el lago es hermosa, pero también es peligrosa, porque los peatones que pasan por la mañana pueden no estar presentes. capaz de distinguir el lago del lago. Y los peatones en el camino cayeron de cabeza al lago frío...
Unas cuantas ciruelas de invierno han florecido en el ciruelo, tan blancas como la nieve blanca. No es de extrañar que se confundan con la nieve blanca. Hace mucho tiempo que escucho que las flores de ciruelo están en plena floración en la nieve. Cuando las vi hoy, me quedé asombrado y sentí lástima por ellas: admirar las flores solo en el vasto mar de nieve es inevitablemente solitario e insoportable. , pero cuando las flores florecen, desaparecen silenciosamente. Es realmente algo inquebrantable. El Llanero Solitario abrochado.