Un ensayo de 600 palabras, una foto inolvidable
Aunque mi carrera fotográfica no es muy larga, me he "comido" innumerables películas, y dos cartones llenos de fotografías y negativos decentes.
En mi memoria, lo que recuerdo con más claridad es una foto de noticia llamada "Toma de rehenes". Fue esta foto la que me valió el gran premio en el concurso de fotografía "New Beijing Everyday" organizado conjuntamente por la Asociación de Fotógrafos de Beijing, Beijing Daily Courier y el sitio web Beijing Kunpeng. ¡También fue esta foto la que me hizo comprender lo difícil que es tener una foto valiosa!
Lo inolvidable no es el brillante honor y el generoso bono, sino el emocionante origen de esta foto. Al mismo tiempo, todavía está viva en mi mente la intrépida dedicación de los agentes de policía y los periodistas políticos y jurídicos de la capital, que no temieron el derramamiento de sangre ni el sacrificio.
El 13 de mayo de 2001, a las tres de la madrugada, cuando todavía dormía, me despertó de repente un rápido timbre del teléfono. Una voz rápida salió del receptor: un caso de toma de rehenes con un artefacto explosivo ocurrió en la estación de tren Oeste de Beijing. La situación es extremadamente crítica. Por favor, acuda inmediatamente al lugar. Este caso es una orden. Como oficial de propaganda de la policía ferroviaria, mi primer instinto fue correr al lugar del crimen sin dudarlo.
Salté de la cama, agarré el bolso de mi cámara y el libro de entrevistas, bajé las escaleras y tomé un taxi hasta la estación de tren Oeste de Beijing.