Tres secretos para mantenerse feliz en una vida acelerada
La sociedad actual va demasiado acelerada y hay infinitas cosas que hacer todos los días, lo que hace que la gente esté muy cansada e irritable. ¿Cómo mantenerse feliz en un entorno así? En realidad, esto no fue un problema al principio porque no me di cuenta de que necesitaba descansar incluso cuando estaba ocupada.
Desde que me uní a la empresa el año pasado, he estado ocupado. Preparar lecciones, asistir a clases, entregar trabajos, corregir trabajos, registrar calificaciones y analizar exámenes, supervisar trabajos, participar en conferencias académicas y participar en capacitaciones a nivel escolar, proyectos provinciales y a nivel nacional; proyectos y proyectos de reforma educativa; participar en reuniones de unidades irregulares, estudios políticos y reuniones de miembros del partido; completar diversos formularios requeridos por la escuela, imprimirlos, modificarlos y enviarlos. Además, la vida tampoco es fácil: alquilar una casa, comprarla, decorarla y establecerse. Todavía tengo que hacer la compra, cocinar con cuidado todos los días y cuidarme. Hay tantas cosas mezcladas, me ocupo de muchas cosas a la misma hora todos los días y no hay tiempo para respirar.
Cuando estés cansado, querrás maldecir, ¡y nunca terminarás el trabajo! ¡No puedo comer, no puedo descansar, mis músculos continúan relajándose y mi cara se ve apagada! ¿Para qué diablos es esto? No quiero vivir así. Quiero una vida feliz, quiero tener mi propio tiempo y hacer las cosas que me gustan. Entonces comencé a intentar cambiarlo poco a poco. Aunque todavía estoy muy ocupado, mi mentalidad está mucho más relajada que antes. En resumen, hay tres consejos.
Primero, haz una pausa. Cada vez que estoy demasiado ocupado para parar o no puedo esperar al siguiente trabajo, me digo en silencio que haga una pausa. Escuche sus sentimientos y organice el próximo trabajo con calma. No sea impulsivo ni se obligue a completarlo. Es normal permanecer incompleto. Las cosas menos importantes y urgentes pueden generar largas colas. Por ejemplo, envío urgente, cumplimentación de materiales, etc. Presta atención a lo que estás haciendo.
En segundo lugar, hacer ejercicio. No vale la pena enojarse porque tu trabajo se ha puesto feo. Haga ejercicio al aire libre al menos una o dos veces por semana y, normalmente, haga yoga en casa para sentir su cuerpo. Sólo cuando disminuye el ritmo se da cuenta de que necesita un gran cumplido y un abrazo.
En tercer lugar, siéntete libre de ser tú mismo. Hay demasiada presión del mundo exterior y siempre estamos tratando de satisfacer las demandas y expectativas de otras personas, ignorando nuestras propias necesidades. Sé tú mismo y trátalo con calma. Tengo la última palabra sobre en qué quiero centrarme y hacer. Acepta quién eres, cuídala y ámala. Al igual que cuando un burro pasaba por la puerta cuando yo era niño, me gustaba imitar el rebuzno del burro. No es nada, solo sé feliz.
No importa lo ocupados que estemos, nuestra meta es una vida feliz, así que mantente despierto, haz ejercicio regularmente y sé tú mismo.