Fotografía de Pequeño Yeso

También me impactaron una profunda introspección y compasión.

Parece que nunca conocemos realmente a nuestros padres. ¿Estará triste?

Película: Vacaciones después de tomar el sol

Valoración DB: 8,0.

Premio de Oro a la Cinematografía en el Festival de Cine de Cannes

Este es el debut de la directora, pero su lenguaje cinematográfico es muy maduro y sofisticado.

La historia comienza desde los ojos de una niña de 11 años que se encuentra de vacaciones junto al mar con su padre. A través de fragmentos de la conversación, entendí que los padres de la niña deberían haberse divorciado y ella vivía con su madre todos los días. Este es un raro momento a solas con mi padre.

Hay muchos espacios en blanco en la película, el fondo del padre, las cortinas que se balancean, el silencio de la noche... el ritmo es lento, pero es en esta atmósfera donde se puede sentir lo que Se esconde bajo la apariencia tranquila del padre.

Cuando la pequeña le preguntó a su padre en tono quejoso, cuando tenía 7 años, su madre le dijo que se iba a comprometer, pensando que eras tú. En este momento, debería querer una disculpa o consuelo de su padre. Es famoso que mi padre, que estaba sentado frente a la pared del baño, luchó por quitarse el yeso del brazo y accidentalmente se cortó el brazo con unas tijeras. La sangre le corría por el brazo.

En esta toma, sentí profundamente el reflejo de la niña adulta sobre el pasado. Si hubiera sido más atento y considerado, habría notado que mi padre estaba descontento.

En mi impresión, los padres parecen no tener emociones. Ellos controlan nuestras alegrías, tristezas y alegrías. A medida que crezco, me doy cuenta de que, independientemente del papel de mis padres, o en cualquier caso, cada uno es un individuo independiente al principio, y encontrará reveses insuperables y la propagación de la tristeza.

Sobre el pasado y los padres, las tomas del director lo explican con precisión. Mirando hacia atrás, lo único que puedo pensar son a menudo fragmentos. Al identificar a los padres a los ojos de un niño de 11 años, podemos descubrir muchas pistas que fueron ignoradas y nunca notadas en el pasado.

Me recuerda a mi padre en Diet, que nunca tuvo la oportunidad de apelar o contar su historia en la mesa. En la mesa de la cena, estaba la hermana mayor, la segunda o la menor, pero mi padre nunca escuchaba.

La profunda introspección y compasión del director también me impactaron.