En el lugar de trabajo, ¿cómo debe manejar un jefe la relación con sus subordinadas?
Por el contrario, es más común en el lugar de trabajo, porque la capacidad laboral es más destacada y valorada por los jefes masculinos, lo que a menudo atrae críticas de subordinados masculinos, subordinados masculinos y otras subordinadas femeninas. Por lo tanto, para evitar que se cuestione esta equidad, al establecer objetivos y organizar diversas tareas a principios de año, se deben presentar indicadores cuantitativos con el mayor detalle posible para reflejar los logros y deficiencias personales con datos objetivos y justos y hechos. Esto es convincente. Mantenga una distancia de trabajo normal y maneje la equidad de las recompensas y castigos, y es básicamente improbable que ocurran problemas importantes.
Cuidar a chicas jóvenes que acaban de empezar a trabajar, o ver la protección inconsciente de mujeres hermosas, suelen ser cosas que algunos jefes masculinos harán con naturalidad. Pero otros colegas pueden ser sensibles a este tipo de cosas. Si no quieren dar oportunidad a los rumores falsos, deberían tratar a todos sus subordinados por igual. Aunque ahora hombres y mujeres son iguales, la mitad de ellos son mujeres en el lugar de trabajo. Sin embargo, las mujeres todavía tienen sus propias especialidades en el lugar de trabajo, como las necesidades familiares, los días especiales cada mes, la falta de intimidad con el sexo opuesto, la inadecuación para viajes de negocios de larga duración y la susceptibilidad. Como líder, debes considerar plenamente estos puntos, para que la coordinación del trabajo pueda realizarse sin problemas y el equipo pueda estar activo y estable.
Se debe tener en cuenta la situación real de las mujeres a la hora de asignar el trabajo. Las mujeres son más serias, delicadas y tienen una fuerza física limitada. Por lo tanto, como líder, al asignar trabajo, debe considerar qué puestos requieren personas cuidadosas y cuáles no requieren trabajo físico pesado. Oriente esta parte del trabajo hacia las empleadas. Si tiene una reunión por la noche o trabaja horas extras demasiado tarde, pregunte a las empleadas si pueden irse a casa primero. Todos los directivos varones deberían recordar esto como un principio básico. Una vez que se toca la línea roja, le resultará difícil tratar a todos los subordinados por igual y su gestión se verá interrumpida.